El interventor municipal, enfrentado con el regidor ourensano, ve como se desestima el recurso del Concello, que vuelve a fracasar en sus intenciones.
La buena acogida del paro celebrado el lunes, con un seguimiento de en torno al 90% según los sindicatos, motiva a los trabajadores ya no solo a ampliar los días de huelga, sino incluso a declararla indefinida.
Los socialistas acusan al alcalde auriense de no contar con este organismo, que no se convoca desde 2016.
Tras meses de impagos, negociaciones y reclamando al Concello que ponga en marcha el Plan de Estabilización, los trabajadores secundarán la huelga el 31 de octubre.
Con una huelga de funcionarios inminente en la ciudad, el alcalde recurre una nueva sentencia por la jornada laboral que ya fue anulada en primera instancia y en el TSXG.
Los nacionalistas ponen en jaque la viabilidad económica del Concello, en una situación ya delicada de por sí.
Los sindicatos reiteran que ya hay un acuerdo que obliga al gobierno local a concluir el proceso antes del 31 de diciembre.
Los populares piden "levantar las líneas rojas" y anuncian que, mientras dure esta cortapisa, no acudirán a más reuniones. Los partidos se acusan unos a otros de pactar entre ellos en la sombra.
Más de un año ha tardado la fiscalía en concluir la investigación sobre las grabaciones en las que Jácome, presuntamente, in amañaba el contrato para el derribo del matadero municipal y exigía a dos funcionarios que asumiesen una multa a su coche oficial. El político siempre negó la veracidad de los audios, alegando que estaban manipuladas, incluso llegó a denunciar al periódico que las publicó. Ahora el fiscal lo denuncia formalmente a él, justo cuando el PSOE está moviendo piezas para una moción de censura.
Los alcaldes con dedicación exclusiva, como es el caso del líder de Democracia Ourensana, pueden cobrar del Ayuntamiento y también tener actividades privadas, pero éstas deben ser marginales y contar con visto bueno del pleno. No sucede así en el caso del alcalde de Ourense, que lleva años cobrando de múltiples fuentes sin permiso, algo que la Fiscalía ve irregular, por lo que remite el asunto al Tribunal de Cuentas, aunque no ve indicios para abrir un procedimiento penal.
El fallo emitido por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Ourense supone un duro revés para el regidor, sobre el que crecen las voces críticas.
Un año después de las elecciones municipales, que se celebraron el 28 de mayo de 2023, el PSOE municipal de Ourense ha hecho un llamamiento de "consenso" a los otros grupos de la oposición --BNG y PP-- con el objetivo de, mediante una moción de censura, "dar un golpe de timón" y "cambiar el rumbo" de la ciudad y del ayuntamiento que, alertan, está "en una auténtica bancarrota económica".
Los grupos de la oposición acusan a Jácome de falta de transparencia y piden concreción en los asuntos a abordar
La situación es tan grave en el Concello, donde muchos trabajadores, especialmente bomberos y policías, siguen sin percibir la totalidad de la nómina, que los grupos municipales denuncian que ya encuentran dificultades para adquirir material de ferretería.
Un mes más, y pese a las promesas del gobierno municipal, los trabajadores del Concello de Ourense ven como sus ingresos están por debajo de lo pactado: ni rastro incremento del 0,5% ni plues de nocturnidad y festivos en sus nóminas.
Jácome se gana la reprimenda del presidente del Parlamento tras gritar "bravo" al término de la intervención de su compañero de Democracia Ourensana. Los localistas ponen énfasis en que la provincia necesita más inversiones en campos como la sanidad y en la lucha contra el cambio climático.
Los socialistas ourensanos critican que el regidor "imponga la dictadura" durante los casamientos en el concello.
La Fiscalía acaba de anunciar la apertura diligencias contra el regidor ourensano por una denuncia presentada en diciembre por excompañeros de Democracia Ourensana, pero sobre una cuestión que saltó al público hace años.
El aludido niega en conversación con este diario las acusaciones vertidas desde el grupos socialista y recuerda que accedió a su puesto por concurso público.
Los socialistas ourensanos acusan al alcalde de convertir el Concello en la "fábrica del enchufismo".