El reloj corre contra Jácome y el Concello de Ourense, incapaz de renegociar el proceso de estabilización

Las hojas del calendario van volando y cada vez quedan menos páginas en el taco de este 2024. Restan poco más de 100 días y en el Concello de Ourense queda mucho trabajo por hacer, especialmente en lo relativo al proceso de estabilización de empleo prometido y que el gobierno de Gonzalo Pérez Jácome lleva posponiendo desde hace mucho tiempo. Los últimos cartuchos parece que se gastaron hoy durante la mesa xeral de negociación, donde los sindicatos, de forma unánime, dijeron "no" a la renegociación propuesta.

CIG, CSIF, UGT, CC.OO. y S.P.P.M.E., como informa la junta de personal, han declinado renegociar un proceso de estabilización que, reiteran, "no existe". "Ya está todo negociado. Lo que nuestro alcalde quiere es imponer y hacer lo que le da la gana", consideran desde la junta de personal en una nota emitida en la que "agradecen" (con toda la ironía del mundo) a los "técnicos municipales que le brindan a nuestro alcalde un excelente asesoramiento en favor de todos los trabajadores y trabajadoras del Concello".

El tiempo apremia en el consistorio auriense porque, como han indicado desde Comisiones Obreras a este medio en más de una ocasión, el proceso de estabilización debe cristalizar antes del 31 de diciembre, fecha en la que vence el plazo. 

DENUNCIAS Y OPOSICIÓN

"Estamos hartos que desde la alcaldía hagan lo que les de la gana, sin contar con los sindicatos, como por ejemplo, los nombramientos a dedo, que están en el juzgado denunciado por CC.OO. o, por ejemplo, impedir al personal interino y laboral acceder al concurso del plan de estabilización de empleo del Concello de Ourense, que está aprobado en Mesa de Negociación y publicado en el BOP el 31-12-2022", recordaban a este diario el pasado mes de julio, aventurando más recursos ante la Justicia.

"Nos preocupa la parálisis y el engaño", reconocían entonces los afectados, llamando a Jácome a cumplir con la Ley del Gobierno de España. De hecho, el mes pasado Luis Seara, portavoz del BNG en el Concello, cuestionaba los cambios propuestos por el gobierno municipal.

"Lo que pretende el alcalde es distorsionar la realidad: por una parte, modificar un proceso de estabilización que se está dando en todas las administraciones, especialmente en lo que tiene a ver en caso de empate, por otro, introducir la RPT cuando nada tiene que influir en este proceso", censuraba Seara, entendiendo que "la modificación de las bases pretende, de modo directo, una modificación encubierta de los criterios de desempate para acceder a un puesto laboral ya ocupado por personal de larga duración".

No solo los nacionalistas cargaron contra Jácome en este capítulo, sino que los socialistas también interpretan que los movimientos dados por DO buscan cambiar por completo lo pactado. "Parece que pretende cargarse el proceso de estabilización y sacar adelante una nueva RPT delirante mientras es incapaz de poner en marcha una OPE decente y adecuada a las necesidades de Ourense", comentaban desde el grupo del PSdeG.