Manifestantes atacan con pirotecnia a la Policía Nacional en otra noche de protestas ante Ferraz

Otra noche más los manifestantes se han concentrado a las puertas de la sede del Partido Socialista en Madrid. La calle Ferraz fue, de nuevo, escenario de altercados y cargas policiales contra los manifestantes -muchos de ellos de estética ultra, portando banderas preconstitucionales y entonando cánticos fascistas o, directamente, reconociéndose como nazis-, después de que la jornada comenzase con protestas en el día en el que el PSOE y Junts per Catalunya han firmado el acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez y la ley de amnistía.

El "acuerdo de la vergüenza", como la califican desde la bancada popular, es la motivación por la que cerca de 8.000 personas se han congregado otra noche más ante la sede socialista. Figuras de Vox, como su líder Santiago Abascal -recibido al grito de "presidente" por los congregados en Ferraz- y de las Nuevas Generaciones del PP han marchado esta jornada en Madrid en una protesta en la que se corean cánticos como "Socialistas hijos de puta", "Marlaska maricón" o "España cristiana y no musulmana". 

También hubo cánticos contra la corona y la familia real, palabras de recuerdo a Alejo Vidal-Quadras, expresidente del PP de Cataluña, fundador de Vox y víctima de un ataque con arma de fuego esta mañana, así como saludos fascistas y el 'Cara al sol', como en noches pretéritas.

Como en noches anteriores, el despliegue policial por la capital es intenso y este jueves, sin llegar a los niveles de tensión de otras noches pasadas, la protesta se desarrolló con relativa normalidad hasta bien entrada la noche. No obstante, con el paso de las horas grupos de jóvenes con el rostro cubierto fueron tomando posición en la primera línea de la protesta. Pasadas las 22:30 empezaron a lanzar pirotécnica contra los antidisturbios que acordonaban la zona, así como bengalas y otros objetos.

Como respuesta tuvieron lugar sendas cargas policiales que disperasaron a los violentos, que la emprendieron con mobiliario urbano y con los periodistas desplazados al lugar. Hay al menos una decena de detenidos en estos momentos.