El reto demográfico es uno de los que España, con una población cada vez más envejecida, debe afrontar en los próximos años. Sin embargo, puede ser algo complicado si se observan datos de una encuesta reciente publicada por El Mundo que apunta que 6 de cada 10 jóvenes no se plantean la posibilidad de tener hijos en los próximos 5 años.
El sondeo, de hecho, asegura que las cifras son parecidas entre las personas encuestadas y que están entre los 30 y los 44 años, edades en las que, hace pocas generaciones, lo habitual no únicamente era ser padres o madres, sino que los hijos u hijas fueran ya hubieran crecido.
A eso cabe añadirse otro dato; y es que entre enero y junio de 2023, en España se contabilizaron 155.629 nacimientos... lo que supone la cifra más baja registrada para ese semestre desde que el Instituto Nacional de Estadística (INE) los contabiliza.
Edad al margen, un 13% de los encuestados aseguró que su intención es tener hijos en los próximos 5 años, mientras que también había un buen número de indecisos sobre la cuestión.
Otro aspecto que debe considerarse es que en el agregado de los datos, las mujeres que dicen no quere son más (84,9%) que los hombres (80,8%).
¿POR QUÉ LA NATALIDAD ES BAJA?
Desde la Universidad San Vicente Mártir de Valencia aseguran que algunos factores que han contribuido a la baja natalidad en España son el retraso de la maternidad hasta lograr una estabilidad laboral, la falta de políticas de conciliación, el desempleo, la inseguridad económica, el aumento de separaciones, el incremento del coste de la vida, el envejecimiento de la población, la pérdida de poder adquisitivo y la nueva ley del aborto.
También señalan que el cambio social que hemos vivido (y que aún sigue en marcha) dificulta la adopción de responsabilidades a largo plazo. Los expertos de la universidad señalan que para muchas persons es más importante "la realización personal en el mundo laboral o procurar espacios de ocio en los que la consecución del placer y la evitación del sufrimiento hacen difícil ofrecer la propia vida para hacer vivir a otros".
Los expertos critican "la escandalosa inacción de los gobiernos, específicamente de los países como España en los que el problema de implosión demográfica es especialmente grave", considerándolo un ejemplo "de miopía sociopolítica de consecuencias presumiblemente desastrosas".
BRUSELAS RECOMIENDA QUE SE TOMEN MEDIDAS
En este sentido, el año pasado la vicepresidenta de la Comisión Europea, Dubravka Suica, alertó que las previsiones dicen que en 2070 en la Unión Europa sólo vivirá un 4% de la población mundial.
"No podemos obligar a nadie a tener hijos, es una decisión personal, pero podemos influir de forma indirecta", dijo Suica, dejando claro que Bruselas necesita que esta tendencia se revierta.
En España, por ejemplo, aseguró que sería básico potenciar el desarrollo de las zonas rurales, donde asegura que el problema es "tremendo", con el objetivo de fomentar la natalidad.
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