central térmica

El Concello pontés tratará de mantener "la protección y supervivencia de la chimenea", pero siempre que eso no impida la instalación de nuevas empresas en ese terreno. 

Los proyectos, claves para la recuperación industrial de la zona, han pasado un primer corte de la Xunta de Galicia.

Los sindicatos y la Coordinadora de las empresas auxiliares convocan la protesta para mañana miércoles a las 11:30 horas.

La quema de las últimas reservas de carbón en As Pontes acerca a la central térmica a su punto y final después de casi medio siglo de actividad.

Piden no tener que pasar por "el desempleo" ante los planes de formación y posibles incorporaciones a nuevas empresas

El presidente de Iniciativa Empresarial del Noroeste (IEN) por Europa, Manuel Pérez, ha lamentado "profundamente" la decisión de autorizar el cierre de la central térmica de Endesa en As Pontes cuando "todavía no se ha puesto la primera piedra de ninguno de los proyectos llamados a convertirse en su alternativa industrial". Considera, en consecuencia, que "llega sin garantías de futuro".

 

La autorización del Gobierno de España significa el fin de una industria histórica en Galicia, pero viene de la mano de la creación de nuevos empleos: "Contabilizando las iniciativas empresariales impulsadas con otras compañías como Sentury Tire y Ence (900 puestos y 832 millones de euros), que se desarrollarán sobre los terrenos de la antigua central, los empleos directos y estables generados alcanzarán hasta 1.300".

Como consecuencia, los planes para la reconversión industrial de la zona, dependiente de esta industria durante décadas, prevén una inversión superior a 2.500 millones de euros y generar más de 1.300 empleos directos.

En poco menos de 20 segundos la icónica chimenea de la central térmica se vino abajo luego de la explosión controlada con la que los operarios procedieron a su derribo.

 

Mercedes Queixas, del BNG, se ha referido a la "descoordinada" planificación para la zona, con diferentes anuncios de proyectos "de los que no se sabe nada"

La demolición controlada tuvo lugar a la hora prevista pese a que el clima amenazaba con retrasarla o posponerla.

 

La central térmica de Fenosa (ahora Naturgy) en As Encrobas, Meirama, Cerceda (A Coruña) será demolida mañana miércoles 21 de diciembre en torno a las 15 horas. Se ha establecido un perímetro de seguridad de 250 metros en torno a las instalaciones.

 

Una fábrica de neumáticos que creará 300 puestos de trabajo, una fábrica de papel tisú puntera en el país, una reconversión hacia las energías renovables...son muchos los proyectos que hoy estudia Ana María Pena, concelleira de Industria en el Concello das Pontes, que atiende a Galiciapress para explicar la última hora de cada uno de estos proyectos, en distintas fases de tramitación.

 

El cierre de la central térmica no ha pillado por sorpresa al Concello de As Pontes, que en el último año comprobó como la intención de Endesa no era otra que echarle la llave a la planta sin importar su viabilidad.

Endesa ha certificado que las mezclas de biocombustibles y carbón que ha estado probando en su central térmica de As Pontes (A Coruña) no permiten prolongar la vida de la instalación debido a su inviabilidad "ambiental, técnica y económica", lo que confirma el proceso de cierre para la planta.

Ricardo Casas, vicepresidente del comité de empresa de la central térmica de As Pontes, atiende a Galiciapress para profundizar en la realidad de la factoría, que a día de hoy subsiste con una plantilla mermada y con la amenaza de despidos que pesa tanto sobre la central como sobre las empresas auxiliares. Las alternativas industriales en la zona, la tan ansiada transición energética justa o futuras protestas son otros de los temas de esta conversación.

El comité de empresa de la central térmica de As Pontes denuncia una vez más los movimientos de Endesa en la planta y acusa a la dirección de acometer un “desmantelamiento camuflado”.

Galiciapress entrevista a Ana María Pena Purriños, concelleira de Industria de As Pontes y, por lo tanto, encargada de bregar con Endesa sobre el cierre de la térmica y las posibles alternativas industriales, entre las que podrían estar dos grandes proyectos financiados con los fondos de la UE para la recuperación.

La compañía eléctrica se ha comprometido a retomar la pruebas con biocombustibles

El uso de purines como combustible está siendo sometido a estudio en la antigua central térmica de As Pontes, abocada al cierre si no encuentra alternativas al carbón.