Los hechos ocurrieron a raíz de un aviso ciudadano en el que comunicaban que el conductor profesional consumía "habitualmente" alcohol y realizaba servicios de traslado de pasajeros en estado ebrio
Tras darle el alto le practicaron las pruebas de alcoholemia en las que arrojó un resultado positivo de 0,70 miligramos de alcohol por litro de aire espirado
"El conductor que accedía a la plaza desde la Avenida Florida continuó recto, hasta impactar con la jardinera de la rotonda” relata la Policía Local de Vigo, que le hizo la prueba de alcoholemia.
La Guardia Civil investiga al conductor de un camión que circulaba por la localidad lucense de Vilalba quintuplicando la tasa de alcohol permitida.
La Policía Local intercepta a un conductor que dio positivo en cocaína y carecía de carné por pérdida de todos los puntos
La conductora circulaba por una carretera convencional a una velocidad de 130 kilómetros por hora
El Ayuntamiento declara que "su habla era pastosa, tenía los ojos vidriosos, la voz apagada y desprendía un fuerte olor a alcohol"
La Guardia Civil ha interceptado en la autopista del Atlántico, la AP-9, en Mos (Pontevedra) en sentido Vigo, a un conductor que cuadruplicaba la tasa de alcohol máxima permitida y que suponía un "grave riesgo para la circulación".
El detenido, que conducía de forma temeraria por las calles de Lugo, dio positivo con una tasa de alcoholemia 1,06.
El conductor, de 40 años y natural de Noia, fue captado por un rada en la Autovía del Barbanza.
Varios condutores avisaron de una ambulancia en zigzag por la A-55. El hombre se fugó del lugar.
Conducía borracho y acabó siendo detenido a la altura de Caldas tras recorrer al menos unos 30 kilómetros en sentido contrario.
Una patrulla de la policía local de Ponteareas lo interceptó circulando por el casco urbano sospechosamente despacio.
El conductor tiene en su historial al menos tres positivos por alcoholemia y esta vez superó el 0,90 en dos muestras.
El accidente dañó una tubería de suministro de gas y los cuatro turismos estacionados. Superó el 0,9 en la prueba de alcoholemia.
Tanto el portador de la empanada como el conductor del vehículo han sido denunciados por la Guardia Civil por comportamiento indebido y conducción temeraria.
No tiene carnet, triplicaba la tasa de alcoholemia, llevaba a dos niños de corta edad en un coche sin papeles ni seguro.
La Guardia Civil consiguió dar el alto al conductor, de origen ruso, que sextuplicaba la tasa de alcohol máxima permitida.