Todas las personas que viven con perros necesitan un nuevo seguro obligatorio con estas características
La obligación ya existía en algunas comunidades pero ahora se extiende a todo el territorio estatal. Afecta a todas las razas de cánidos cuando anteriormente sólo era obligatorio para propietarios de ciertas razas de perros peligrosos. La ley implica mayor gasto para los propietarios que además verán como se prohíbe la venta de crías salvo en casos muy determinados.
El pasado 16 de marzo se aprobó la Ley de Bienestar Animal en el Congreso de los Diputados, aunque el texto que ha entrado en vigor tiene algunos cambios, debido a las negociaciones de los grupos políticos, respecto a la propuesta original.
A la práctica, y para los ciudadanos que convivan con perros en sus pisos o casas, que se haya aprobado esta legislación incluye algunos cambios... que entrarán en vigor muy pronto, en octubre, de modo que deben empezar a hacer algunos trámites que serán de obligado cumplimiento.
SEGURO OBLIGATORIO
Uno de ellos es la contratación de un seguro de responsabilidad civil, un trámite que, hasta la entrada en vigor de la nueva ley, únicamente era obligatorio para los propietarios de los considerados perros peligrosos. Aunque no existía una lista, hacía referencia a razas como dogos argentinos, pit bull terriers, american terriers, rottweilers, akita inu y fila brasileiro, entre otros.
Hay un pequeño asterisco en la no obligatoriedad de esta cobertura, ya que en Euskadi y la Comunidad de Madrid sí que era obligatorio para todos los perros antes de la entrada en vigor de la ley. Ahora, tras su aprobación, lo será en todo el territorio estatal.
Así, hace obligatoria la contratación de este seguro, que debe cubrir todos los años de vida de la mascota. Según la nueva legislación, la cobertura debe incluir a las personas responsables del animal "por un importe de cuantía suficiente para sufragar los posibles gastos derivados, que se establecerá reglamentariamente".
SANCIONES POR INCUMPLIMIENTO
La contratación de este seguro, pues, será obligatorio para todos los propietarios de perros, independientemente de su razo, el 1 de octubre de 2023. Como toda ley, contempla sanciones para quienes la incumplan, aunque el reglamento aprobado contempla multas leves (entre 500 y 10.000 euros), aunque en primera instancia también se podría limitar a una advertencia.
De hecho, lo más lógico sería que las personas reincidentes terminaran recibiendo las sanciones más duras.
MILLONES DE PERROS (Y FAMILIAS) AFECTADOS
En Catalunya son los ayuntamientos los responsables de tener un censo de estos animales (también de gatos y hurones), que acostumbran a ser la mascota preferida por las personas y las familias.
Según los datos más recientes, en España hay censados unos 7,5 millones de perros, según datos de la Red Española de Identificación de Animales de Compañía (REIAC), aunque la cifra real podría ser mayor, ya que muchos propietarios no los tienen debidamente identificados.
Algo parecido ocurre en Catalunya, donde los datos de 2021 cifraba en unos 700.000 los perros censados en las distintas administraciones locales. Sin embargo, la cifra también podría ser mayor.
RESTRICCIONES EN LA VENTA Y LA CRIANZA
Otra de las derivadas que también ha modificado la Ley de Bienestar Animal son la venta y la crianza. Con la aprobación de la ley, la venta de perros (y también de gatos y hurones) solo podrá hacerse por criadores autorizados, sin la intervención de mediadores.
Así, la venta de animales de compañía queda regulada, estando solo autorizados a realizarla los criadores que tengan los permisos pertinentes. Se prohíbe la participación de mediadores en el proceso, así como la venta por parte de particulares.
De la misma manera, también queda limitada a profesionales registrados con este fin en el Registro de Criadores de Animales de Compañía. Las condiciones de la actividad, los tipos de criadores y la periodicidad de camadas se desarrollarán reglamentariamente.
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