La bajada de peajes y la transferencia de la infraestructura forman parte del acuerdo por el cual el BNG apoyó la investidura
"Una máquina de hacer dinero". Así define la Plataforma Empresarsial de Afectados AP9 la autopista del Atlántico. Llevan varias presentaciones por toda Galicia para animar a los conductores a sumarse a la demanda colectiva contra la concesionaria de la Autopista del Atlántico; al igual que hizo la Fiscalía, pero el ministerio público no representará ni autónomos ni a empresas.
De la reunión entre Audasa, concesionaria de la AP9, y el Ministerio de Fomento sale un compromiso, aunque muy limitado, de compensar a los conductores que a diario se ven atrapados en unas obras que, en teoría, fueron aprobadas esta Navidad. Además, el Estado anuncia medidas especiales al hilo del puente del Día das Letras Galegas.
La ceremonia en la que el presidente del Gobierno inauguró el puente de Rande esta Navidad ha venido seguida de meses de colapsos, pues las obras no estaban acabadas y de hecho Fomento dice ahora que quedan por los menos dos semanas. Eso si, Audasa, la concesonaria, pudo subir los peajes. La oposición pide explicaciones a un ministro que no se digna a recibir a los alcaldes de una de las zonas afectadas.
"Tratan de ocultar el espectáculo bochornoso que tendrían que dar los diputados gallegos del PP votando a favor de Audasa", reprocha Alexandra Fernández.
No se compromete, eso sí, a mantener su gestión en el sector público. En Galicia sostienen que "no es el momento oportuno" para debatir sobre los peajes.
Audasa inicia el asfaltado del tablero central del puente, que obliga a desvíos entre los carriles y puede durar hasta el verano.
Marea de Vigo ha denunciado que la exención del IBI se ha convertido un "copago" para los ciudadanos de los municipios por donde pasa la autopista.
Antón Sánchez critica que la subida de los peajes en la AP-9 compensa la "contabilidad ruinosa" de otras autopistas, con el "silencio cómplice" de la Xunta.
Este año empiezan a vencer las concesiones más antiguas, mientras la arteria gallega tiene una prórroga hasta 2048.