Calendario de movilizaciones contra el Grupo Stellantis de las víctimas de los motores defectuosos Puretech

En torno a 765.000 vehículos en España tienen un motor defectuoso. Se trata de un daño crítico, como ya han acreditado muchos ingenieros y mecánicos, y que solo tiene un final: la reparación total del motor, algo que costará a los propiestarios del turismo en cuestión varios miles de euros. Son coches fabricados a partir de 2014 aproximadamente y que pueden ser de distintas marcas como Opel, Jeep, Toyota, Citroën o Peugeot. Es posible que su coche ya haya sufrido este colapso del motor, y si no es así pero está dentro de este selecto grupo, lo más seguro es que acabe sucediento más pronto que tarde. El daño es de una dimensión tan grande que los afectados por este defecto de los premiados motores Puretech que en España y otros países ya existen asociaciones de afectados, que han anunciado un calendario de movilizaciones para exigir al Grupo Stellantis una solución a sus problemas. 

Hasta la fecha se han celebrado protestas en ciudades como Tarragona, donde nació este movimiento que cuenta ya con más de 6.000 asociados, o Vigo, donde se celebró hace unas semanas una concentración ante la factoría de Balaídos. Hasta ahora, y con un proceso judicial en ciernes que contó Galiciapress tras hablar con el coruñés Christian Díaz, abogado experto en derecho empresarial que lleva la demanda contra la casa automovilística, la Asociación de Afectados Stellantis (AFESTEL) prepara nuevas movilizaciones por la "falta de respuesta del fabricante de los motores defectuosos". 

"GANAR TIEMPO Y ABURRIR"

Los afectados señalan que están viviendo "un drama" y el bufete que lleva el caso -que recuerda que solo los afectados integrados en AFESTEL pueden participar en la demanda, por lo que insta a los interesados a contactar con la organización para poder beneficiarse en el futuro de las posibles compensaciones que puedan lograr judicialmente- insiste en que un caso único a nivel mundial porque "nunca se han dado tantos afectados" como es el caso de los motores Puretech, donde solo en Europa puede haber cerca de 4 millones de damnificados. 

"Stellantis sólo ha mantenido una reunión con los portavoces de los afectados, el pasado mes de septiembre, pero sin compromiso formal alguno", lamentan desde la plataforma. Desde la compañía indican que están buscando "una solución global", pero todavía no hay acciones que respalden esa iniciativa. Stellantis vive en estos momentos un periodo complejo a nivel empresarial, teniendo en cuenta los movimientos que ha dado la compañía, inmersa en una espiral de caída de ventas, para sustituir a su CEO, Carlos Tavares.

Yerba Luca de Tena, presidente de AFESTEL, subraya que esa solución tendría que haberse buscado "desde el primer momento en que se detectaron los problemas". En ese sentido, considera que el grupo pretende "ganar tiempo" y "aburrir" a los demandantes, que ahora plantean más movilizaciones en ciudades donde esté presente Stellantis para llamar la atención sobre este defecto de fábrica. 

Piden, además de reconocer el error, la retirada "de los vehículos para achatarrar" y el retorno de "los importes abonados por reparaciones y mantenimientos excesivos", así como una "compensación por cada día que el vehículo ha estado parado sin coche de sustitución para el usuario y que compense la devaluación del vehículo", que ahora no tiene interés en el mercado de la segunda mano.

MOVILIZACIONES EN BARCELONA, SEVILLA, ZARAGOZA Y MADRID

Barcelona, ciudad que, según las cuentas de AFESTEL siguiendo los datos del registro de la DGT, cuenta con unos 80.000 coches con ese defecto, será la primera ciudad en la que se celebren protestas. El 9 de noviembre tendrá lugar la movilización en la ciudad condal, mientras que el 23 de noviembre será el turno de Sevilla, siendo la Andaluza una de las comunidades con el mayor número de víctimas -Cataluña es, según las cifras, la comunidad con más afectados-. Zaragoza, el 14 de diciembre, y Madrid, el 21 del último mes del año, serán las otras ciudades donde aquellos coches afectados -los que todavía puedan circular- hagan sonar sus bocinas como protesta. 

Rafael es uno de los miles de afectados que sufrió una avería en su coche, matriculado en 2015, a los 52.000 kilómetros. "Se me paró el coche a 120 km/h en plena autovía y me libré de un accidente de casualidad. La reparación me costó 2.200 euros, pero lo peor es jugarse la vida con estos coches todos los días, tenemos la espada de Damocles encima cada vez que usamos estas bombas de relojería. Compramos un coche con ilusión y resultó ser un fraude", lamenta. 

Adolfo, un compostelano en la misma situación que Rafael, explicó a este diario su experiencia, en su caso con un Peugeot 308 que empezó a dar problemas con menos de 90.000 kilómetros. "Iba circulando en el coche con mi hijo y se encendió el piloto de fallo de presión y aceite. De repente reventó la correa de distribución en medio de la autopista y me faltó muy poco para quedarme sin frenos. El coche se bloquea y me quedo tirado con el niño a un lado de la carretera", relató a Galiciapress. 

¿CUÁL ES EL FALLO CRÍTICO?

El gran condicionante es que, como indicaba Adolfo, la compañía se excuda en que cada propietario realiza un mantenimiento individualizado a cada coche, por lo que cada circunstancia tiene que medirse de forma individual, aunque estos motores, llamados "pudretech" por las víctimas, están siempre condenados a romperse por un defecto. 

"Se trata de una anomalía de fabricación de este tipo de motores utilizados en marcas como Opel, Peugeot, Citroën, DS, Jeep y Toyota, que consiste en una degradación paulatina de la correa de distribución, lo que provoca un elevado consumo de aceite, mal funcionamiento de la bomba de vacío y otros graves fallos que derivan en una prematura degradación del motor. Todo ello supone para los propietarios costosas reparaciones, ya que los concesionarios no atienden las reclamaciones amparándose en que los plazos de garantía han vencido o en que las reparaciones no se han llevado a cabo en el propio concesionario de la marca, aunque hay numerosos usuarios que sí lo han hecho", agregan desde la organización.

"Todo debe acreditarse. Todas las facturas y demás documentación debe incorporarse en el informe de cada caso", indican los abogados sobre este daño para el que "no existe reparación" y que hace, como en el caso de Adolfo, que su coche "necesite el mantenimiento de un Lamborghini" y lo obliga a andar siempre "con un bidón de aceite en el maletero".