Aulas vacías y cacelorada por la falta de suficientes profesores en Cee

La comunidad educativa de Cee, en la comarca de la Costa da Morte, ha convocado una jornada de huelga y protestas para este viernes 4 de octubre en rechazo a los recortes en educación.   La ANPAs CEIP Vila de CEE y familiares han manifestado su preocupación por la situación en los centros educativos de la zona, denunciando la falta de recursos y la carencia de profesorado. Las imágenes publicadas por el ANPA indican que las aulas han quedado vacías.

Entre las principales quejas se encuentran las dificultades para atender a los niños con necesidades educativas especiales, que constituyen alrededor de un cuarto de la población escolar. Las familias denuncian que muchos de estos alumnos no pueden contar con los apoyos que necesitan, lo que compromete su desarrollo académico.

Otra de las preocupaciones expuestas es la falta de refuerzo educativo para los alumnos de los cursos superiores. Según las ANPAs, este refuerzo se ha reducido considerablemente, afectando la calidad del aprendizaje. Asimismo, las actividades extraescolares, como excursiones y salidas, también se han visto limitadas debido a la falta de personal docente para acompañar a los alumnos. 

Son protestas y motivos similares a las convocadas hace unas semanas por varias ANPAs de colegios de Santiago de Compostela.

En señal de protesta, se ha convocado una "gran cacerolada" a las 19:00 horas en la Plaza 8 de marzo de Cee, a la que se espera que asistan familias vestidas de luto como símbolo del deterioro de la educación pública. Los organizadores instan a los asistentes a hacer ruido con cacerolas para visibilizar la falta de recursos y profesorado en los colegios. 

Las ANPAs critican duramente la gestión educativa por parte de las autoridades competentes. Según estas asociaciones, la administración educativa ha incumplido sus compromisos, señalando que el pasado curso s

e había acordado reforzar los centros con tres nuevos docentes, una promesa que dicen no se ha cumplido.

Además, las familias acusan a la inspección educativa y a la consellería de intentar "manipular" y "engañar" a la comunidad escolar para que acepten la situación actual sin protestar. La preocupación por los recortes ha llevado a las familias a preguntarse qué medidas se tomarán en el futuro si la situación no mejora.