Rueda pide a MasOrange, alabada por su "compromiso con Galicia", que el impacto del ERE sea "mínimo" en R Cable

El pasado 12 de junio todo eran sonrisas y apretones de manos entre el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, y el consejero delegado de MasOrange, Meinrad Spenger, en un encuentro donde el gigante de las telecomunicaciones en España -es, tras la fusión de MásMóvil y Orange, la compañía con más contratos del sector en estos momentos- reafirmó su apuesta por Galicia, una comunidad con lazos estrechos con esta firma que posee, entre otras, a la marca R Cable. En esa reunión el CEO de MasOrange presentó el plan de inversiones de la compañía mientras Rueda trasladó su agradecimiento por el "compromiso con Galicia", al tiempo que solicitó el mantenimiento y refuerzo tras los cambios derivados de la fusión. 

Ha pasado un trimestre desde aquella conversación y la noticia en MasOrange es la puesta en marcha de un ERE que, en el caso de Galicia, supondrá fulminar en torno al 20% de la plantilla de R Cable, donde defienden que hay suficiente carga de trabajo como para considerar que "no sobra nadie" entre los 135 trabajadores que componen las plantillas de sus sedes en A Coruña y Vigo. 

Con uno de cada cinco empleos en R Cable en el aire, alguno podría pensar que los compromisos de Spenger con la Xunta, con la que R ha ganado cerca de 40 millones en los últimos años por los contratos que matiene con la administración pública, quedan en papel mojado.

"TENEMOS QUE SER EXIGENTES"

¿En qué situación queda la relación contractual de la Xunta y R Cable? Alfonso Rueda, interpelado por Galiciapress, no dice sentirse "traicionado" después de dos reuniones con Spenger, con quien admite no haber comentado los planes de MasOrange para sumir un Expediente de Regulación de Empleo durante sus reuniones presenciales. 

"Una vez que tomó la decisión de que se hiciese público me llamó para decirme que se iba a producir. Lo que le pedí, y creo que es lo que me corresponde, es que tuviese el mínimo impacto posible en Galicia y, a ser posible, ninguno", detalla el mandatario de su última conversación con el CEO.

Lo que también reclamó Rueda es que la decisión "no suponga la merma de ninguna de las prestaciones a la que están obligados por contrato". "Lo que me corresponde ahora es que los contratos sean prestados en su plenitud. Exigir eso y hacer lo posible para que el impacto en Galicia sea de la mínima intensidad", defiende Rueda, al tiempo que apunta que desde el Gobierno de Galicia no pueden "hacer más en este momento, pero tampoco menos".

"Tenemos que ser especialmente exigentes y disponer la colaboración de la Xunta de Galicia para que el impacto sea mínimo", zanja Rueda.