Ucranianos generan docenas de empleos en Galicia al instalarse con su portal de comercio electrónico en Cariño

Después de medio año en Cariño, los emigrantes ya han tenido oportunidad de aclimatarse a la idiosincrasia de vivir en una pequeña y remota villa marinera de Galicia. ¿Nos merecemos los gallegos nuestra fama de reservados? 

"Solo hemos visto cosas buenas de los gallegos y los cariñenses, ni en nuestros mejores sueños podíamos imaginar la benevolencia y el amor que recibimos"

"Solo hemos visto cosas buenas de los gallegos y los cariñenses. Nuestras expectativas no eran demasiado altas, porque aceptamos el hecho de que la confianza debe ganarse siempre y en todas partes, pero ni en nuestros mejores sueños podíamos imaginar la benevolencia y el amor que recibimos", responde Olga.

Eso sí, la trabajadora reconoce que tan calurosa acogida puede estar influenciada por su condición de desplazados porque  "en una situación normal, si solo viniéramos de otro país para hacer negocios, todo, por supuesto, sería diferente".   

 A pesar de los intentos del Kremlin para que los europeos retiren su apoyo a Ucrania debido al impacto de la guerra en sus vidas por el alza de precios, Strelnyk no ha notado que la calurosa acogida se haya enfriado a medida que pasan los meses.  Su evaluación general por ahora es que "los gallegos son gente amable y estamos muy contentos de estar aquí".

REGUGIADOS SÍ, EMPRESARIOS Y TRABAJADORES TAMBIÉN

Es más, destaca que con el paso del tiempo las autoridades les han ido facilitando más y más la vida, al menos en lo burocrático  ya que "pudimos completar documentos, obtener el derecho a trabajar, alquilar una casa y oficina, abrir cuentas bancarias, permanecer en el país por más de 90
días, etc. Antes de esto, todo esto era muy difícil e inaccesible para la mayoría y sin esto es
imposible integrar el negocio". 

Eso, el "negocio", es clave para entender lo que está pasando en Cariño, ya que su centenar de nuevos habitantes no son los típicos refugiados. Son refugiados en el sentido de que huyeron de una guerra pero a la vez son trabajadores inmigrantes, con la peculiaridad que no trabajan por cuenta ajena para españoles, han emigrado a Galicia con su propio negocio a cuestas. 

Con una década de experiencia, AVTOPRO es una de las plataformas líderes en Europa en el comercio B2B de recambios de coches. Es decir, ponen en contacto a proveedores - como fabricantes o desguaces - con consumidores, principalmente talleres de reparación de vehículos, aunque también los particulares pueden comprar piezas. Aseguran disponer de un catálogo de 23 millones de componentes y unos 500 proveedores certificados.

Un modelo de negocio que, vista la alta gama  de algunos de los vehículos con matrícula ucraniana que circulan por Cariño, funciona. Además, ser intermediarios virtuales les ha permitido trasladarse desde las tranquilas aguas de Odessa, a las orillas del Mar Negro, hasta el ventoso Ortegal, donde el Atlántico abraza el Cantábrico.  

¿Por qué eligieron Cariño? En parte por casualidad. Olga estaba en Cariño por un viaje de negocios cuando estalló el conflicto. Decidió que allí era un buen lugar para criar a sus hijos y al final unos 80 trabajadores se instalaron en la villa. 

AVTOpro tiene miles de usuarios y acaba de lanzar una nueva iniciativa, un canal de Youtube, AVTO España, en donde sus clientes pueden subir sus propios contenidos, con la ayuda técnica de la empresa, relacionados con los recambio y el mundo de los coches.  

No es una apuesta causal porque, explica Strelnyk, "en términos de cobertura de audiencia, YouTube está ganando cada vez con más confianza a la televisión, convirtiéndose en el canal de medios número 1, también está integrado con Google, que entiende que el video es mejor contenido que el texto con imágenes, por lo que las páginas con videos obtienen una ventaja".  

 "Es difícil transmitir nuestra desesperación en los primeros días, cuando, estando aquí, nos enteramos de que nuestros hijos fueron despertados por explosiones. Los extraños en la calle nos abrazaban y lloramos juntos, a pesar de la barrera del idioma"

Volviendo al aspecto humano, Strelnyk hecha la vista atrás y señala que "es difícil transmitir nuestra desesperación en los primeros días, cuando, estando aquí, nos enteramos de que nuestros hijos fueron despertados por explosiones. Los extraños en la calle nos abrazaban y lloramos juntos, a pesar de la barrera del idioma". 

La relación entre Cariño y Ucrania no se interrumpirá pronto, visto que la guerra está escalando. Afortunadamente, los nuevos cariñenses no tendrán problema para seguir allí, contribuyendo al desarrollo económico y social de una villa de 2.600 habitantes.

Bruselas acaba de prorrogar por un año el permiso excepcional que permite a todos los ucranianos trabajar, viajar y vivir en la UE sin lograr antes la condición legal de refugiado. Una gran noticia de la que, desgraciadamente, no se pueden beneficiar otras personas también huyeron de sus hogares por temor a una guerra, por ejemplo, afganos o iraníes.