Plantas de biomasa como la de Curtis ya fueron "prohibidas" en otras regiones
La asociación ecologista Arco Iris advierte del "impacto ambiental intolerable" y pide cambios en el proyecto o su "retirada definitiva".
La asociación ecologista Arco Iris ha enviado a la Consellería de Medio Ambiente una serie de alegaciones contra la prevista planta de biomasa de Teixeiro, en Curtis (A Coruña), en las que solicita varias mejoras en el proyecto o su "retirada definitiva".
En un comunicado, ha recordado que la empresa Renova tiene previsto construir en el polígono industrial de Teixeiro "una megaplanta de 50 megavatios", lo que, ha subrayado, está "prohibido" por la normativa vigente, además de producir, ha añadido, "un considerable impacto ambiental".
En el caso de Teixeiro, ha indicado el colectivo ecologista, sería necesario "abastecer las calderas de la megaplanta con más de medio millón de toneladas anuales (de combustible forestal) para mantenerla a pleno funcionamiento".
En este sentido, Arco Iris ha advertido de la posibilidad de que en la fábrica podrían quemarse "otro tipo de productos", como "lodos de depuradoras", que en la actualidad, ha denunciado, "se vierten sin control en los municipios de Curtis y Sobrado".
"Esta posibilidad generaría un impacto ambiental intolerable en un municipio incluido dentro de la Reserva de la Biosfera de As Mariñas y destino final de la prevista gran planta de elaboración de productos lácteos", ha opinado el colectivo ecologista.
Asimismo, ha advertido a la Consellería de Medio Ambiente de la "generación de gases de efecto invernadero", como "partículas en suspensión, dióxido de azufre, óxidos de nitrógeno y monóxido de carbono", en "cantidades muy importantes".
De hecho, ha asegurado que plantas de similares previsiones han sido ya "prohibidas" en el País Vasco, Extremadura y Las Palmas.
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