El personal de control de acceso a espectáculos y actividades recreativas deberá renovar su permiso cada 10 años

Tendrán que pasar un examen de aptitud psicológica, carecer de antecedentes penales y superar un curso

El personal encargado de controlar el acceso a espectáculos públicos y actividades recreativas deberá cumplir una serie de requisitos, como carecer de antecedentes penales, superar un curso y pasar un examen de aptitud psicológica con el que podrán obtener una licencia que tendrá una vigencia de diez años.

Así figura en el decreto que regula la actividad de control de acceso a espectáculos públicos y a actividades recreativas, publicado en el Diario Oficial de Galicia este miércoles, dos semanas después de que el pasado 11 de marzo recibiese luz verde por parte del Consello de la Xunta.

El nuevo texto adapta las condiciones que deben cumplir los profesionales que se dedican al control de acceso a establecimientos y espectáculos para adaptarlo a la normativa actual, además de reformular el temario para la prueba de conocimiento que deben superar para obtener la licencia.

Esta curso estará centralizado en la Academia Galega de Seguridade Pública (Agasp), donde los interesados en obtener el permiso recibirán formación sobre la normativa básica que rigen los espectáculos públicos y las actividades recreativas, la regulación sobre el juego, el derecho de admisión, medidas de seguridad a cumplir, el régimen jurídico de los menores de edad, conceptos básicos de primeros auxilios o "técnicas básicas de autocontrol en situaciones de extrema necesidad", entre otras cuestiones que conforman el temario.

SIN ANTECEDENTES Y CON PSICOTÉCNICO
Asimismo, otro de los requisitos que han de cumplir los profesionales del sector para obtener la licencia es carecer de antecedentes penales y superar un examen psicológico en un psicotécnico, que deberá determinar la aptitud de la persona para ejercer el puesto de trabajo.

Entre las labores definidas en el decreto para estos trabajadores está garantizar el acceso ordenado al recinto o establecimiento, comprobar la edad de los asistentes y que no figuren en el registro voluntario de personas con prohibición al juego, garantizar que las bebidas se consumen dentro del local e informar al personal de seguridad o a las fuerzas del orden en caso de que sea necesario.