La mina de Doade, en el municipio ourensano de Beariz, se ha convertido en un actor clave para la autonomía europea en la carrera por la transición energética. La Comisión Europea ha incluido este proyecto —el único gallego— entre los 47 designados como estratégicos bajo el Critical Raw Materials Act (CRMA), una iniciativa para reducir la dependencia de importaciones de minerales esenciales. La decisión, comunicada esta semana, prioriza el acceso a financiación y agiliza los trámites administrativos, aunque también reaviva el debate sobre el impacto ecológico de la minería.