Los detenidos residían en Madrid y se desplazaban por toda la península para entrar por la fuerza en centros de mayores y llevarse las cajas fuertes con dinero,joyas y datos personales como DNIs.
El alcalde quiere que sea la Xunta, que "abandonó indebidamente" el edificio ahora propiedad de la Seguridad Social, "la que lo pague".
La residencia 'Mi Casa' mantuvo escondidas en el cobertizo durante horas a cinco personas mayores con la intención de ocultar la sobreocupación de plazas.
Estes casos ocorren dous anos despois doutro que tardou dous meses en resolverse e que levou ao hospital a oito persoas que vivían no centro.