El PP propone en el Congreso una ley para mejorar la seguridad de los profesionales sanitarios ante las agresiones
El PP presentará en el Pleno del Congreso de los Diputados una proposición de ley para contar con un marco regulatorio específico que proteja a los profesionales sanitarios y refuerce su seguridad ante agresiones y situaciones de violencia.
De este modo, la iniciativa, dirigida tanto al sector público como all privado, se tomará en consideración en el Pleno del Congreso del próximo martes, tal y como figura en el orden del día, recogido por Europa Press.
Según defienden los 'populares', a pesar de las leyes e iniciativas actuales para evitar la violencia contra el personal sanitario en los centros de trabajo, el problema "no desaparece". Es por ello por lo que, al amparo del artículo 40.2 de la Constitución Española y de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, el PP promueve esta ley para prevenir las agresiones.
El PP propone regular las medidas mínimas y básicas que debe implantar el empleador, público o privado, en los centros de trabajo, con el fin de "garantizar la seguridad y salud del personal sanitario" y de "prevenir y evitar el riesgo de sufrir daños por actos de violencia infligido por terceras personas".
Asimismo, el PP indica que la ley se aplicará en el ámbito de las relaciones de carácter administrativo o estatutario del personal sanitario al servicio de las Administraciones Públicas, así como en el ámbito del personal sanitario con contrato de trabajo sujeto al Real Decreto Legislativo 2/2015, de 23 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores. También lo serán en el ámbito de las relaciones laborales ordinarias.
La iniciativa señala que es obligación del empleador "prevenir, eliminar o disminuir" el riesgo del personal sanitario de sufrir actos de violencia. Además, cada servicio de salud o empresa contará con un Plan de Prevención contra la Violencia en el ámbito sanitario.
Este Plan evaluará el riesgo de daños por violencia en función de factores relevantes en cada centro, como la asistencia a pacientes con historial de adicciones; la asistencia sanitaria domiciliaria; la pobreza ambiental; el acceso a puertas de salida, y el tiempo de espera de pacientes.
Asimismo, los 'populares' proponen implantar medidas como sistemas de videovigilancia en pasillos, salas de espera y de admisión y dispositivos de alarma sonoros en consultas. También sugieren que se incluya en la historia clínica del paciente "sus antecedentes como sujeto activo de violencia sanitaria, y otros detalles de la agresión que permita identificar su gravedad".
REGISTRO NACIONAL DE LOS ACTOS VIOLENCIA EN EL ÁMBITO SANITARIO
La proposición del ley señala que el Ministerio de Sanidad deberá crear un Registro Nacional de actos de violencia en el ámbito sanitario, en el que habrán de inscribirse y registrarse todos los actos de violencia que hayan sido notificados por el personal sanitario, así como la identificación de la víctima y del agresor.
Igualmente, el empleador pondrá a disposición del personal sanitario que haya sido víctima de un acto de violencia en el ámbito sanitario, un servicio específico encargado de prestar el apoyo psicológico que en cada caso se precise. También habrá a su disposición un servicio encargado de tramitar directamente con el Ministerio Fiscal las denuncias que pudiera presentar con ocasión de un acto de violencia en el ámbito sanitario. Así, el empleador tendrá suscrito un seguro que garantice al personal la gratuidad de los servicios jurídicos que precise.
Al hilo, los 'populares' indican que el personal sanitario víctima de un acto probado de violencia sanitaria podrá solicitar el traslado a una plaza o puesto de trabajo en distinto centro de trabajo o, en su caso, servicio o unidad.
MÁS DE 13.000 AGRESIONES AL AÑO EN EL SNS
Los últimos datos publicados por el Ministerio de Sanidad revelan que en el año 2022 se notificaron un total de 13.210 agresiones en el conjunto del Sistema Nacional de Salud, un 5 por ciento más que en 2021.
Una de las últimas agresiones ocurrió el pasado lunes, cuando un paciente agredió con un arma blanca a un enfermero y a un guardia de seguridad en el servicio de Urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac).
Precisamente, este jueves, la Guardia Civil ha comunicado que ha detenido a una mujer que agredió al pediatra de su hijo y a una auxiliar del centro de salud de Muxía (A Coruña). Según relatan fuentes del Instituto Armado, la mujer llegó al consultorio y pidió al médico datos de su hijo. Como no se los proporcionó, le abofeteó y llegó a romperle las gafas, tras lo que agredió a la auxiliar de enfermería que acudió en su ayuda.
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