Galego
La represión a las mujeres de Irán no moviliza a los gallegos, salvo unas pocas excepciones en Vigo y Compostela
La opinión pública gallega y española están centradas en la guerra de Ucrania y la subida de los precios. La prolongada represión contra los manifestantes en Irán empieza a suscitar algunas muestras de solidaridad en las calles de Galicia, pero por ahora la respuesta de la ciudadanía es tímida. En el plano político, ninguna de los principales partidos ha puesto esta crisis, que se ha cobrado ya docena de muertos, en primer o segundo plano. Es más, casi nadie la ha mencionado, con la excepción de algunos movimientos sociales.
El Foro Galego da Inmigración convoca una concentración en apoyo a las mujeres iraníes este miércoles en Compostela. Será a las siete de la tarde en la Praza 8 de marzo. El lema es "No dejaremos de luchar por la mujer, la vida y la libertad". Es la segunda concentración de este tipo, tras la de la semana pasada.
El colectivo gallego acusa al Gobierno teocrático de ser un "régimen que atenta contra los derechos humanos y especialmente contra los derechos de las mujeres durante los últimos 44 años".
Este sábado hubo una acción solidaria en Vigo. Medio centenar de personas se concentraron al mediodía frente al museo Marco convocadas por el colectivo Feminismo Unitario, con el apoyo de algunos colectivos como Anticapitalistas Galiza.
Algunas se cortaron el pelo en solidaridad con las represaliadas. El manifiesto de la protesta recordó que la negación de derechos a mujeres se da en todo el planeta y aplaudió la valentía de las activistas iraníes por enfrentarse a la dictadura islámica.
Hay que recordar que una mujer de 22 años fue murió en Irán tras ser detenida por la "policía de la moralidad" por supuestamente no cubrirse la cabeza de la manera impuesta en aquel país.
Parte de la ciudadanía considera lo sucedido un asesinato, aunque las autoridades alegan que murió por un problema de salud. En consecuencia, en las últimas tres semanas, las protestas, encabezadas por mujeres iraníes y que pronto contaron con el apoyo de otros sectores de la población, se han ido sucediendo e intensificando. A menudo pacíficamente, pero también hay duros enfrentamientos con la Policía.
Pese a que el Estado tilda a los manifestantes de marionetas de Estados Unidos e Israel, y a pesar de que la dura represión del gobierno está aumentando, gran parte de la ciudadanía -sobre todo las jóvenes- continúan demandando un cambio de régimen.
Por otra parte, la Rede de Colexios de Xornalistas, de la que forma parte el Colexio Profesional de Xornalistas de Galicia, ha condenado las detenciones de informadores. Los periodistas reclaman a la República Islámica que "cese sus ataques a la libertad de prensa" y pide a Moncloa que meta presión a Teherán en defensa de los derechos humanos.
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