Un concejal del BNG en Poio, investigado por un presunto delito de prevaricación
El PP denunció presuntas irregularidades en la contratación de puestos ambulantes de la Festa do Mar de Combarro en 2014. El edil rechaza dimitir por "las garrapiñadas y los tiovivos".
El juzgado de instrucción número 2 de Pontevedra ha citado a declarar en calidad de investigado al concejal de Turismo de Poio, Xosé Luis Martínez (BNG), a raíz de una denuncia presentada por el PP por presuntas irregularidades administrativas cometidas en la contratación de la Festa do Mar del año 2014, que se celebra en la localidad de Combarro.
El juez entiende que los hechos denunciados por los populares ante la Fiscalía pondrían de manifiesto la posible comisión de un delito de prevaricación por la contratación supuestamente irregular de nueve puestos ambulantes.
El PP considera, como explicó en su día su portavoz municipal Ángel Moldes, que "se incumplieron los requisitos legales establecidos, tanto en la contratación como en publicidad y transparencia" al entender que debió haber un concurso público.
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia confirmó que el concejal del BNG está citado como investigado para el 4 de mayo a las 9.30 horas. "Estamos hablando de las garrapiñadas y los tiovivos", precisó el edil, que compareció este jueves en rueda de prensa arropado por el alcalde Luciano Sobral y el resto de concejales del BNG en Poio, donde aseguró estar "tranquilo" ante esta situación.
Xosé Luis Martínez aclaró que el auto no le acusa de cometer un "enriquecimiento personal o político" o de "trato de favor", sino que aborda "cuestiones técnicas y administrativas".
Por su parte, el regidor local trasladó "total colaboración" con la Justicia para el esclarecimiento de este caso que enmarcó en la "estrategia sucia" del PP. Xosé Luis Martínez ha avanzado que no presentará su dimisión, al considerar que el juez solo le pedirá "aclaraciones", que estará "encantado de dar", por el procedimiento administrativo que siguió el Ayuntamiento de Poio para la concesión de esos puestos.
En opinión del BNG y del equipo de gobierno, la "preocupación" del Partido Popular no son los hechos objeto de la denuncia sino "acabar con uno de los eventos más importantes que se llevan celebrando en el ayuntamiento". "Hay alguna gente a la que le duele este éxito", añadió.
Luciano Sobral ha advertido al PP que en su equipo no cederán "a chantajes judiciales" y ha señalado que es "triste" que opte por judicializar la vida política municipal "para intentar llegar a la alcaldía" ante su "incapacidad para obtener el respaldo de los ciudadanos".
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