​Atalaya Mining amenaza con volver a las trincheras y busca reactivar el ‘Proyecto Touro’

La ‘Plataforma Veciñal Mina de Touro – O Pino NON’ advierte en un comunicado de las intenciones de la multinacional afincada en Chipre, que pese a no contar con la aprobación de la Xunta en el pasado todavía no ha dado carpetazo a su macroproyecto minero.

La compañía le ha dado a sus inversores su “compromiso con encontrar una solución para el desarrollo” del proyecto en los terrenos de la antigua mina de Touro. "Insiste en entrar por la fuerza, como un elefante en una cacharrería”, critica la plataforma.

Trabajos de Atalaya Mining en Touro

El pasado enero tuvo lugar en Galicia el último asalto de un combate de varios años entre una multinacional minera con sede en Chipre, que cotiza en la bolsa de Londres pero con inversiones chinas y suizas, de un lado y vecinos de Touro y O Pino, ecologistas, trabajadores del mar y diversos colectivos contrarios a la apertura de un macrocomplejo minero en el otro. Ganaron los segundos, liderados por la ‘Plataforma veciñal Mina de Touro - O Pino NON’, que tras luchar contra viento y marea, además de contra las administraciones locales, lograron vencer a Atalaya Mining, que pese a la Declaración de Impacto Ambiental negativa firmada en su día por la Xunta parece volver a la carga.

Pese a los argumentos de la Xunta para declarar medioambientalmente insostenible el proyecto de Atalaya Mining, la empresa, “socia mayoritaria de la promotora Cobre San Rafael, que es quien realmente presenta el proyecto y no cuenta con más avales que la declaración de intenciones de la multinacional”, como señala la plataforma vecinal, tiene intención de retomar las armas en Touro. “Insiste en entrar por la fuerza, como un elefante en una cacharrería”, lamentan desde la organización.

ATALAYA MINING CONTRAATACA

Desde el colectivo advierten que en la última presentación trasladada a los inversores de Atalaya Mining la multinacional trata de convencerles de que existe un “compromiso con encontrar una solución para el desarrollo” del Proyecto Touro. Con todo, mantienen que el almacenamiento de las balsas de locos es “la mejor práctica internacional”, pese a los números informes desfavorable, como el realizado en 2019 por el geofísico Steven Emerman, que explicaba los déficits de este sistema y el riego existente para los vecinos de Touro.

“Este tipo de anuncios por parte de Atalaya Mining a sus inversores no es nada nuevo, pues ya en enero de este mismo año, tras conocer la resolución negativa de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) manifestaba la intención de recurrir legalmente la resolución administrativa”, comentan desde la plataforma.

RESTAURACIÓN DE LOS TERRENOS

En ese sentido, la organización vuelve a reclamar “la restauración de los terrenos y de las aguas de la antigua mina, cerrada hace más de 30 años, que generan graves perjuicios para el medio ambiente”, con un especial impacto no solo entre la población de Touro y O Pino, sino también en los cauces fluviales, como pasa a día de hoy en el río Portapego.

"Lo que debe hacer Atalaya Mining, y así la Xunta se lo debe exigir, es restaurar los daños causados en las últimas decadas", señalan.

“Los vecinos y vecinas de Touro y O Pino no cesaremos en nuestro empeño de que se cumpla la legalidad y se depuren todas las responsabilidades derivadas de la gestión de la mina de Touro, tanto en lo referente al proyecto actual como a las consecuencias derivadas de la anterior explotación de cobre y de las actividades de la actual concesionaria”, concluye la nota.