Ayuntamiento de San Sadurniño reutiliza las papeletas electorales para crear blocs de notas

Un colectivo de personas con discapacidad se encargó de evitar que el papel acabase en el contenedor

El Ayuntamiento de San Sadurniño (A Coruña) ha recibido este martes los 300 blocs de notas que han sido elaborados utilizando como materia prima las papeletas electorales de las pasadas elecciones del 26 de mayo, tanto las utilizadas para escoger a los representantes locales como europeos.

Del trabajo se han encargado los miembros del centro ocupacional que la Asociación de Pais de Nenos Con Problemas Psicosociais (Aspaneps) tiene en el vecino municipio de Fene, también perteneciente a la comarca de Ferrolterra.

El alcalde de San Sadurniño, Secundino García (BNG), ha destacado que esta iniciativa "es más que nada un gesto a favor de la integración sociolaboral que desarrolla Aspaneps, pero también de la reutilización".

Así, el regidor nacionalista ha pedido una reflexión "sobre cuánto papel se destroza en unas elecciones, y no solo papeletas, sino también sobres que llevan impreso el año". "Si no se lo llevaran podrían reutilizarse los que sobraran, pero así hay que tirar con ellos", ha añadido.

El alcalde ha lamentado que se continúe "con un modelo electoral del siglo pasado, basado en el papel, cuando vivimos en una época en que hay tecnología para pasar a un sistema telemático, que agilice los procesos electorales y que nos evite tanto despilfarro de papel y de dinero".

TRES MODELOS DIFERENTES
A partir de la reutilización se han elaborado tres modelos de blocs de notas: dos encuadernados con canutillo y tapa de cartón y un tercero engomado, con las papeletas de las elecciones europeas en este último caso, de color azul claro.

En Aspaneps, su educador Xavi Picos ha explicado que el proceso de fabricación es muy "sencillo": "Hicimos blocs y libretas, cortamos el papel, les hicimos agujeros, les pusimos gusanillo y el cartón de la portada y contraportada, los serigrafiamos y nada más. Todo es reutilizado, mismo las tapas son de cartón que pedimos en un supermercado y que ellos antes tiraban".

Picos ha reconocido que fabricar las 300 unidades les llevó "alrededor de cinco días de trabajo artesanal". "También es un trabajo de tipo terapéutico y social", ha apostillado.