El hasta hoy líder de los populares se ha despedido de la dirección del partido en un discurso serio, sin apenas personalismos, pero con algún reproche. Ha deseado a su sucesor, que casi con toda probabilidad será el gallego y presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijóo, "mucha suerte, mucho acierto y todo el éxito y respaldo, que sin duda va a necesitar".
Finalmente, no se debe perder de vista el impacto que en esta última crisis interna del Partido Popular tiene la evidencia de que el gobierno español de turno (PSOE, UP), mal que bien, va gobernando y tirando para adelante.
El PP se halla inmerso en un conflicto marcado por las acusaciones mutuas de Casado y Ayuso: el presidente de los populares acusa a Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, de haber favorecido a la empresa en la que “trabaja” su hermano con la compra de unas mascarillas.
En medio de la guerra abierta entre los bandos de Ayuso y Génova, muchas miradas se dirigen a Alberto Nuñez Feijóo, dado el peso del PP gallego en el partido a nivel estatal ante una eventual lucha por desbancar a Casado.
La crisis de Gobierno casi permanente que vive la coalición PSOE-Unidas Podemos le viene de perlas al PP
El encuentro entre el líder del gobierno y el líder de la oposición produce algunos resultados, fruto en parte del cambio de tono del PP. Así, los conservadores aceptan impulsar reformas legales y crear un ente específico para impulsar la recuperación económica. De lo que no quiere ni oír hablar Casado es de un pacto para los PGE de 2021.
Pedro Sánchez tiene muy complicado sacar adelante la prórroga porque tanto nacionalistas como PP no están por la labor, a pesar de que el presidente del Gobierno advierte de que no hay plan B ante un probable rebrote del coronavirus en España.
La reunión mantenida entre el presidente del Gobierno de España y el líder de los populares se ha zanjado sin ningún tipo de avances, con la renovación del Consejo General del Poder Judicial todavía en el aire junto con otros muchos temas que necesitan de una mayoría amplia que solo el PP puede dar.
A Ciudadanos Galicia se le complica el horizonte. O combaten solos en las elecciones autonómicas o se integran en las siglas del PP gallego. Estas son las opciones que les planteó antes Feijóo y ahora asume Casado.
Mientras que Pablo Casado y su cúpula ven con buenos ojos la propuesta de la portavoz de Ciudadanos, entre los populares gallegos mantienen la tesis de Feijóo, que en su día manifestó que Ciudadanos Galicia “cabe dentro del PPdeG”.
"Lo máximo que podemos hacer, y los españoles han entendido, es que le demos garantía de estabilidad y de gobernabilidad", ha afirmado el líder del PP.
que, al igual que sucede con la descubierta por Heurística, dejó funcionar en cuanto fue expuesta publicamente.VERSIÓN DEL SEÑALADOCuando saltó el caso, el activista declaró a El Diario , medio que desveló el caso, dijo que "participo como militante en las acciones que el partido lanza" .Limitó sus prácticas a rebotar contenidos que el PP envía: "El partido nos remite por grupos de WhatsApp algunas ideas y nos pide colaboración en hashtag concretos y como imagino muchos voluntarios y simpatizantes hacen, participo poniendo mensajes con ese hashtag y retuiteando los mensajes más interesantes que veo".
Casado le anima una y otra vez a que revele que se volverá a presentar en Galicia pero el, erre que erre, sigue ganando tiempo. Quien sabe si pendiente de lo que pasará con su líder estatal, con cuya estrategia ha vuelto a marcar distancias hoy, tras unos nuevos comicios en España.
Después de unas "tranquilas" vacaciones, los políticos vienen con las pilas cargadas.
Yolanda Díaz (Galicia en Común), única gallega que participa en la ronda de consultas con Felipe VI, exige al nuevo ejecutivo medidas concretas en materia de industria e infraestructuras