Vecinos y ecologistas presentan demanda en la Audiencia Nacional contra las obras de la A-57 en Pontevedra
La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza (ADEGA) y la Plataforma de Afectados por la A-57 han anunciado la presentación de una demanda ante la Audiencia Nacional contra el proyecto y el Estudio de Impacto Ambiental del tramo II de la autovía A-57, entre A Ermida y Pilarteiros. El tramo afecta directamente a las parroquias de Xeve y Bora, en Pontevedra.
Las organizaciones sostienen que el proyecto aprobado incurre en deficiencias en su Estudio de Impacto Ambiental, lo que habría generado preocupación entre los residentes de las áreas afectadas. Según la plataforma vecinal, las obras previstas pondrían en riesgo el equilibrio ecológico y social de las parroquias de Xeve y Bora.
Darán más detalles de la demanda en una rueda de prensa que tendrá lugar el miércoles 20 de noviembre, a las 11:00 horas, en la calle Benito Corbal, 47, de Pontevedra.
La demanda es la acción más reciente en una larga serie de protestas y objeciones por parte de los vecinos y ecologistas contra la construcción de la autovía A-57, que continúa generando una fuerte oposición entre los vecinos de las parroquias afectadas y grupos ecologistas.
Los vecinos denuncian que el trazado actual tendrá un impacto devastador en el entorno rural, afectando a numerosas viviendas y partiendo en dos las parroquias de Bora, Xeve, Verducido y Santa María de Xeve.
Otra de las principales preocupaciones es el impacto ambiental. El proyecto afectará a 6.000 metros cuadrados de Red Natura de Especial Protección en las inmediaciones del río Lérez, con el riesgo adicional de vertidos accidentales durante las obras.
Los opositores al proyecto señalan que el informe de impacto ambiental reconoce que la vida a 230 metros de la autovía será "muy difícil" debido a los niveles de ruido, que superarán los límites permitidos. Se han identificado más de 170 casas en esta situación solo en Bora y Xeve.
La historia de la A-57 se remonta a muchos años atrás, cuando se planteó como una solución para mejorar la conexión de Pontevedra y O Salnés. El trazado ha sido objeto de controversia desde el principio. En 2008, las tres fuerzas políticas de la corporación pontevedresa (BNG, PSOE y PP) ya manifestaron su rechazo unánime a la propuesta inicial de la Consellería de Política Territoria.
Actualmente, la Circunvalación de Pontevedra se desarrolla en tres tramos, con un presupuesto total estimado de más de 287 millones de euros. El tramo más polémico, entre A Ermida y Pilarteiros, tiene un presupuesto estimado de 100,15 millones de euros y una longitud de 5,04 km.
Frente a esta situación, la plataforma de afectados ha pedido la implicación de todos los partidos políticos con representación en el Concello de Pontevedra para frenar el proyecto. También han solicitado el apoyo ciudadano.
Por su parte, organizaciones ecologistas como Greenpeace, Amigos da Terra y Ecologistas en Acción han ido más allá, pidiendo la cancelación total del proyecto y la reversión de las obras ya ejecutadas.
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