La Xunta apunta al Ayuntamiento de A Pobra y al Estado por "abandono de funciones" en el vertido de Ribeiriña

La Xunta de Galicia ha acusado al ayuntamiento de A Pobra do Caramiñal (A Coruña) y al departamento de Costas del Estado de "abandono de funciones" en relación con el vertido de hidrocarburos en la zona de A Ribeiriña, que obligó a cerrar varios bancos marisqueros.

La directora xeral de Desenvolvemento Pesqueiro, Marta Villaverde, ha mantenido este viernes una reunión de trabajo con representantes de la cofradía para abordar la situaciñon de los bancos marisqueros afectados por este episodio de contaminación.

Villaverde ha criticado la gestión de Costas, departamento estatal al que la Xunta requirió información sobre actuaciones en la zona del Estado, de regerenación del litoral y de retirada de hidrocarburos en la parcela de la antigua fábrica de la Onza de Oro durante esas obras. También se requirió una propuesta de investigación para conocer conocer el estado actual y que se actuase de forma inmediata para contener la contaminación.

Según ha explicado, la administración central contestó "de modo incompleto, un mes después", por lo que se envió un nuevo requerimiento para que se subsanen las deficiencias en un plazo de 10 días. El pasado viernes se recibió una nueva propuesta, que fue aprobada este martes, y se da un plazo de 4 meses a Cosatas para que presente su informe final, de manera que, con los resultados que se obtenganm, se determinen las actuaciones a seguir.

La directora xeral también ha indicado que el pasado mes de enero se solicitó al Ayuntamiento un informe sobre las medidas urbanísticas adoptadas, previstas o en curso, en relación con las instalaciones de Hadasa; información sobre las medidas de seguridad realizadas respecto de los residuos detectados y para paliar los riesgos ambientales y proteger la salud pública; así como otros documentos técnicos. La petición de información se reiteró el 18 de febrero "al no recibirse respuesta" y, a día de hoy, "no consta contestación".

Por contra, la Xunta defiende que la administración autonómica "intervino desde el primer minuto que fue notificado el vertido". Así, la Consellería do Mar activó el Plan Camgal y desplazó efectivos de Gardacostas a la zona, que desplegaron material anticontaminación y realizaron trabajos de abatimiento mecánico de la lámina de agua afectada. También intervinieron técnicos de la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático.

La Consellería do Mar resolvió cerrar tres bancos marisqueros por la presencia de hidrocarburos. El cierre está condicionado a los resultados que se obtengan en próximos análisis, para comprobar la evolución de la situación.