Galego
Reunión del comité clínico con las restricciones más que probables de Vigo y su área encima de la mesa
La cuarta ola, originada en gran medida por la alta movilidad que se dio en San José y Semana Santa, se ha hecho mucho más presente en zonas turísticas como la ría de Vigo y la ría de Arousa.
En muchos puntos de Galicia, la ola o ha pasado de largo o está teniendo un impacto mucho menos en comparación con las anteriores.
La apertura de A Pobra do Caramiñal, O Grove y Cualedro, en el nivel máximo de restricciones, será otro de los puntos a tratar.
El comité clínico, que asesora a la Xunta en la toma de decisiones, analizará este martes la situación "preocupante" de Vigo y, aunque el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, no ha querido avanzar las decisiones, sí ha augurado que se tendrán que tomar medidas ante una incidencia que se está disparando.
El propio Comesaña indicó este lunes que, "por suerte, la situación de Galicia no es mala", pero ha alertado de que "preocupa el área sanitaria de Vigo". "Evidentemente nos gustaría que la incidencia acumulada estuviese por debajo de 50, pero aún así, con los datos que tenemos hoy, no es mala", ha considerado.
Actualmente, la incidencia es de 88 por cada 100.000 habitantes, una marca que obliga "a estar pendientes todo el rato de las medidas" que se toman, principalmente, de los pacientes que se infectan.
Comesaña ha apuntado que la Xunta sigue trabajando para poner todas las medidas con el fin de que la situación "no vaya a peor", y, de hecho, ha indicado que "los resultados lo han ido demostrando".
Con todo, aunque la situación en general es buena, no es "homogénea" en toda Galicia. Así, hay zonas que "están en una situación francamente buena, muchos ayuntamientos con ningún caso que se mantienen, pero también hay ayuntamientos donde se está incrementado".
En el caso del área sanitaria de Vigo, la incidencia a siete días está por encima del umbral establecido para las medidas básicas, por lo que será analizado en el comité clínico de este martes y "se tomarán las medidas acordes a la situación" de cada ayuntamiento.
Para los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes, está fijado el límite de restricciones en 150, algo a lo que no llega Vigo, pero "está muy cerca". Además, la incidencia a siete días multiplicada por dos, ya lo sitúa en este valor. Hay que tener en cuenta que el comité clínico toma en cuenta ahora los valores a siete días como uno de los parámetros principales, debido a la prevalencia de la cepa británica y variantes más contagiosas en general, de manera que pretende actuar antes frente a las incidencias.
"No me quiero adelantar a lo que se diga mañana (por este martes) en el comité, pero lo probable es que en Vigo tengamos que tomar medidas en estos próximos días", ha dicho Comesaña, quien ha defendido que, donde hubo que poner medidas adicionales después de Semana Santa, "ya se han puesto".
Comesaña ha recordado que ahora mismo hay tres ayuntamientos con restricciones máximas, es decir, con cierre perimetral y de la hostelería --O Grove, A Pobra do Caramiñal y Cualedro--, pero también ha puesto el acento en que hay municipios "con cero casos" y que mantienen "un comportamiento bueno epidemiológicamente".
En todo caso, si entre el martes y el viernes hay que "dar algún paso atrás, por supuesto, se dará", dijo el conselleiro de Sanidade, en un avance de previsiones.
RECIENTES MEDIDAS Y EVALUACIÓN
Precisamente, el viernes pasado entró en vigor la ampliación del toque de queda a las 23 horas y la posibilidad de realizar cenas en locales de hostelería con licencia de restaurantes. Además, Galicia sigue cerrada perimetralmente.
La semana pasada, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, indicó que las medidas de la desescalada gallega serían progresivas y que tendrán un periodo de evaluación de dos semanas, por lo que no se espera que este martes se adopten decisiones con respecto a esta 'vuelta a la normalidad'.
Por otro lado, en las últimas horas, el vicepresidente primero, Alfonso Rueda, avanzó la idea de realizar una prueba piloto con el ocio nocturno, cuyo perfil de locales será determinado por la Dirección Xeral de Saúde Pública. La idea es poder realizar este experimento en el mes de mayo, con el "horizonte" del verano.
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