Resolución a uno de los juicios más mediáticos y repulsivos de la historia de Francia, donde más de medio centenar de acusados se han sentado en el banquillo de los acusados por violar bajo sumisión química a Gisèle Pelicot, de 72 años, que durante, al menos, una década, sufrió abusos continuados por parte de su marido y de decenas de desconocidos.