Amor 2.0: ¿Cómo Internet ha cambiado nuestra forma de amar?
De las flores, los chocolates y los poemas de amor, hemos pasado, en un abrir y cerrar de ojos, a un conglomerado de píxeles en una pantalla y un algoritmo que nos ayuda a encontrar el amor.
¿Más práctico? ¿Menos romántico? Hay opiniones a favor y en contra. Lo que sí es indiscutible es que Internet revolucionó todos los aspectos de nuestra vida, incluyendo la forma de amar.
La historia del amor en línea
Puede que suene muy novedoso y reciente, pero la verdad es que las citas en línea comenzaron en la década de los noventa, cuando aparecieron los primeros intentos de una página para encontrar pareja, una idea novedosa y arriesgada, sin dudas. Y también exitosa.
Esto inspiró a otras empresas a crear más lugares para encontrar pareja. El frenesí máximo llegó con la aparición de aplicaciones móviles creadas especialmente para buscar personas afines, ya fuera para un encuentro ocasional o para intentar una relación a largo plazo.
Atrás quedaron los días en los que las principales opciones para encontrar pareja se hallaban en la universidad, el trabajo o los amigos cercanos. Internet ha hecho posible que dos personas con gustos y expectativas similares puedan encontrarse, aunque no vivan en el mismo barrio ni frecuenten círculos sociales comunes.
Tinder, Bumble, Meetic, Grindr, Happen… la lista parece crecer sin parar, así como la cantidad de personas que se suman a ellas con el propósito de hallar el amor.
El amor en cifras
La idea del amor predestinado parece ser parte de un mítico pasado. Hoy, la Celestina ha tomado forma de algoritmo, un cálculo matemático complejo capaz de emparejarnos con la persona que más se adecúe a nuestras exigencias y expectativas, dentro de un amplio universo de candidatos.
Las posibilidades se expanden a niveles insospechados, sobre todo si tomamos en cuenta que solo Tinder, la aplicación móvil de citas más popular, tiene más de 28 millones de personas registradas, y esta cifra aumenta cada minuto.
Ya en 2017, la tendencia en España era llamativa: alrededor del 15% de los españoles mayores de 16 años estaban suscritos a una página de citas de pago, una especie de cuentas premium que les permite tener más y mejores prestaciones dentro de la aplicación. Un informe de Statista Digital Market Outlook prevé que el mercado de citas en línea tendrá ingresos de 2.980 millones de dólares este año y se espera que el número de usuarios ascienda a 438 millones para 2027.
En la actualidad, España es uno de los países europeos con mayor actividad de su población en el mundo de las citas en línea, ostentando un 12,83% del mercado para 2021, solo superado por Reino Unido, Alemania y Dinamarca.
Principales cambios en la forma de amar
La tendencia es clara. Los amantes de estos tiempos y los que vendrán serán muy diferentes a los del siglo pasado.
- Prefieren encuentros virtuales que presenciales, al menos al comienzo
- Se sienten más seguros y confiados de encontrar pareja a través de estas apps
- Tienen tantas opciones, que existe un verdadero «mercado de citas»
- Ante tanta oferta, las opciones suelen ser más «desechables»
- No se intimidan ni esconden el uso de las aplicaciones de citas
- Las utilizan tanto para encuentros casuales como para encontrar parejas estables
No hay discusión, en España queremos encontrar el amor, e Internet nos facilita la búsqueda.
Un estudio de mercado reciente lo demuestra: un 55% de los españoles usan las aplicaciones de citas para encontrar una pareja estable, un 19% entra solo para hacer nuevos amigos y un 13% para encuentros puntuales de una noche.
Algo que antes podía llevarnos toda una vida encontrar, hoy está, literalmente, en la punta de nuestros dedos. El amor 2.0 llegó para quedarse.
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