Ines Rey: “Hay un relato del miedo con la ocupación que afecta a mucha gente mayor y esto es una absoluta irresponsabilidad"
La alcaldesa de A Coruña encara la recta final de una legislatura marcada por la pandemia. En esta entrevista con Galiciapress, se muestra orgullosa del escudo social construído a nivel local aunque admite que la covid provocó que quedasen proyectos en tintero.
En el plano político, Rey se muestra muy crítica con la alianza del PP y Vox en contra de algunas recientes conquistas sociales de las mujeres y de los colectivos LGTBI, llamándolos hipócritas por enarbolar una cosa y practicar otra.
Más conciliador es el tono con el el actual presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, con quien se reunirá en breve. Aseguran que ambos reman hacia el mismo lado en los proyectos clave para la ciudad, como la desafectación de los terrenos del puerto. Eso sí, a Rueda le recuerda la difícil situación del SERGAS y le reclama no solo más gasto en infraestructuras como el nuevo CHUAC sino también en peronal sanitario.
Lo habitual es que cuando un gobierno local no está en mayoría, como es suyo, es que no haya presupuestos en el último año de legislatura, porque la oposición tiende a ponerse más beligerante ante la proximidad de las elecciones. ¿Qué perspectivas hay en A Coruña para el próximo año?
Que sea lo habitual no implica que no lo intentemos. Somos efectivamente, como dices, un gobierno en minoría; pero si atendemos a los números de acuerdos alcanzados, de 182 remitidos al pleno se aprobaron 181, casi 60 por unanimidad, en un consistorio muy plural. Yo creo que hemos superado ese frentismo que había en otras etapas, apostando por el diálogo con todas las fuerzas. Si todos hacemos lo que decimos, anteponemos los intereses de A Coruña a otras cuestiones, espero que no sea tan complicado. Nuestra intención es que haya presupuestos el año que viene y vamos a trabajar para que los haya. Nuestra disposición es total y espero que la del resto de fuerzas también, salvo que tengan en mente otros intereses que no sean los de A Coruña.
Por fin hay fecha para la reunión con el presidente de la Xunta Alfono Rueda. El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y usted se reunirán el día 4, un día antes de la cumbre hispano-alemana y de la fecha anunciada inicialmente por el Ejecutivo gallego, el día 5. ¿Por qué tardó tanto?
Habrá que preguntarlo en San Caetano. Hemos mostrado nuestra disposición a sentarnos y tener una relación normal. Llevábamos 100 días esperando y celebro que nos haya dado fecha para esa reunión en la que trataremos de asuntos importantes para la ciudad que creo que nos interesan a ambos. Mi objetivo es que los proyectos que están pendientes, como de financiación, salgan adelante, como salieron adelante estos años. Confío en la sensibilidad del presidente, creo que tiene la misma preocupación que yo, que A Coruña sea esa ciudad libre y referente,que está recuperando ese liderazgo. Por lo tanto, creo que remamos en la misma dirección.
El gran asunto pendiente de las relaciones con la Administración Autonómica son los terrenos del Por de A Coruña. ¿Qué pasos debe dar la Xunta para solventar el problema de la desafectación de terrenos, que lleva tantos años pendiente?
Pues tantos años como 17. Un bloqueo que fue desbloqueado por mi, nos sentamos a la misma mesa todos y acordamos una hoja de ruta que pasa en primer lugar por desbloquear una cuestión fundamental para la desafectación de los terrenos, la conexión ferroviaria a Punta Langosteira. Fue el gobierno de Pedro Sánchez quien lo aprobó. Ya nadie me pregunta en las entrevistas por el tren a Langosteira porque ya es una realidad después de 17 años. Otro de los objetivos que teníamos en este mandato era la apertura del puerto a la ciudad y se ha conseguido. A partir de ahí, seguir dando pasos, creo que voluntad política hay; pero ya se han dado pasos en estos 3 años que nos habían dado en los 17 anteriores.
El presidente de la Xunta acaba de anunciar una nueva rebaja del impuesto de patrimonio en Galicia, siguiendo un poco la línea de Madrid y Andalucía …
Sí, la línea neoliberal de sus amigos.
¿Cree que es el momento de bajar impuestos y qué pueden esperar los coruñeses al respecto?
Esa bajada afecta a muy poca gente y que se enmarca en la política del PP. Donde gobiernan se olvidan de la justicia fiscal. Es un concepto que les es ajeno. Justicia y fiscal son dos palabras que nunca van unidas para el PP en la misma frase, salvo cuando tienen que dar cuentas ante ella. Tratan de que los más tienen paguen menos y los que menos tienen sufran más los recortes de la derecha. Creo que hay que analizar este tipo de políticas. Es intolerable que los presidentes autonómicos exijan más transferencias, cuando no ejercen ni despliegan toda la capacidad tributaria que tienen en sus territorios. Es decir, dejo de recaudar el impuesto de patrimonio pero usted Estado me tiene que compensar. Oiga, mire, no. Ejerza usted su presión fiscal, que puede hacer en este caso sobre las rentas más altas y después pida el Estado. Lo que no se puede es soplar y sorber; pero bueno así entiende la justicia fiscal el Partido Popular y así entiende la salida de la crisis, siempre con recortes y siempre recortando impuestos para aquellos que más tienen; para que los que más tienen sigan teniendo más y para que los que menos tienen no disfruten de los servicios públicos de calidad que merece. A mí desde luego no me sorprende viniendo de quién viene.
En Galiciapress hacemos habitualmente mucha información sanitaria, que está marcada por las quejas constantes, por ejemplo en A Coruña hay periódicos colapsos de las urgencias en el hospital. Aunque no sea una competencia local, ¿cómo evalúa la situación?
La situación en A Coruña no deja de ser la misma que en el resto de Galicia. Falta personal, faltan médicos y las listas de espera son interminables. Las esperas para las citas para el médico de cabecera son eternas. ¿Qué pasa? Siempre se recorta en servicios básicos como pueden ser sanidad o educación. Faltan medios personales para atender a la población y es normal que haya colapso de urgencias cuando suben los picos de la gripe en invierno o en verano cuando algunos sanitarios se van de vacaciones, lógicamente. Firmamos la ampliación del CHUAC, en la que el Ayuntamiento hará un esfuerzo financiero importantísimo. Seguiremos exigiendo que la ampliación del gasto no solo debe ir encaminada a la construcción de más espacios, sino que debe reforzarse el personal sanitario para poder atender en condiciones y con un servicio de calidad a toda la población. Desde luego las esperas que hay son intolerables y quiero pensar que esto no esconde una privatización encubierta de la sanidad pública, que está fuera la política del Partido Popular.
Hay cierto revuelo sobre la percepción de la seguridad ciudadana en Os Mallos. ¿Qué medidas ha tomado el Ayuntamiento?
Hemos reforzado los efectivos de la Policía Local allí. La seguridad ciudadana es competencia del Ministerio del Interior, de la Policía Nacional. Por eso, a través de la Delegación del Gobierno, nos comunicamos para que poner en la calle más efectivos de Policía Nacional. Lo que nos cuentan los vecinos es que se han respondido a estas demandas que hacíamos del Ayuntamiento. No vamos a dejar de a dejar de pedirlo tanto para tanto para Os Maios como para aquellos que necesiten un refuerzo. Son barrios tranquilos de gente trabajadora que nunca han sido problemáticos y cuyos vecinos no pueden sufrir temor a salir a la calle o sentir inseguridad cuando sus hijos van al parque o cuando una persona mayor vaya al banco a cobrar la pensión.
También digo que creo que es un tema lo suficientemente serio como para hacer demagogia. Me refiero al discurso del miedo que parece que algunas fuerzas, pretenden que les dé resultado electoral. Creo que es un discurso peligroso que puede suponer la estigmatización de un barrio. De la misma manera que exijo contundencia en los refuerzos policiales exijo que no se utilice electoralmente y sobre todo que no se estigmatice a Os Mallos, un barrio tranquilo y de gente trabajadora.
¿Sucede algo similar con el tema de la ocupación o realmente es un problema social y de seguridad grave en ciudades como A Coruña?
Nosotros mantenemos una política de tolerancia cero con la ocupación con K. Ahí también colaboramos con la Policía Nacional en la identificación de los inmuebles, porque a veces los propietarios están fuera de la ciudad, no residen aquí, para requerir que pongan puertas anti okupa y para que ejerzan rápidamente las acciones para que se pueda proceder al desalojo. En aquellos puntos que se ha detectado, se han eliminado. Nuestra posición es de tolerancia cero y de respeto absoluto a la propiedad privada.
En este sentido también yo creo que falta rigor en los mensajes alarmistas que se lanzan infundiendo miedo a la población. Hay gente mayor que te dice que no va a salir porque tiene miedo de que le van entrar en casa. Yo creo que también existe un relato del miedo con la ocupación que afecta a mucha gente mayor y esto es una absoluta irresponsabilidad.
Los mensajes que se dan de que parece que van entrar en tu casa no vas a recuperar nunca, le tienes que pagar el IBI, la luz, el agua y la compra; pues no es así. Hay mecanismos judiciales y policiales para echar a la gente que usurpa una vivienda de carácter privado.
Luego hay también grandes tenedores como puede ser bancos o fondos de inversión a los que hay que exigir que si han comprado un edificio aseguren ese edificio, que lo pongan en circulación. Las administraciones estamos dispuestas a que nos cedan edificios para vivienda social, que no los abandonen porque sí, en algunos casos, se producen ocupaciones. Repito, grandes tenedores, como bancos o fondos de inversión.
Terminada la campaña turística de verano, ¿qué balance hace?
Tuvimos unas cifras de récord en asistencia a conciertos, a eventos a exposiciones y a actividades, incluso mejorando las cifras del año anterior a la pandemia, del verano de 2019. Estamos recibiendo muchos visitantes extranjeros, hasta ahora el turismo era prácticamente todo nacional. El Aeropuerto de Alvedro y la hostelería lo han notado, las agencias de viaje lo han notado. Es un balance y unos datos muy positivos. No solo porque lo diga yo como alcaldesa, lo han dicho los diferentes sectores, no hay partidismo en las cifras . Por ejemplo, el concierto del Orzán de Tanxugueiras, una banda de mujeres que canta en gallego, batió récord de asistencia con más de 80.000 personas.
En la recta final de legislatura, ¿qué espina tiene clavada y le gustaría solventar en estos meses?
Soy inconformista por naturaleza y con un nivel de exigencia elevado. Este es un mandato diferente condicionado por una pandemia y por lo tanto no todo aquello que queríamos hacer y que podríamos llegar a haber hecho en una situación normal y se ha podido hacer. Evidentemente, han quedado cosas en el tintero porque nos hemos visto condicionados primero con un estado de alarma y después con una salida de la crisis enfocada un escudo social importantísimo para que nadie se quedase atrás. Hay que recordar que A Coruña sacó dos planes PRESCO que movilizaron veinte millones de euros en fondos. Dimos ayudas directas a autónomos, a hostelería, etc. a pesar de no tener ayuda de la Xunta. ¿Dónde están los millones que le entregó el Estado a la Xunta? No han explicado dónde están esos fondos pero desde luego donde no están ya te lo digo yo es en el Ayuntamiento de A Coruña. Es evidente que esa situación condicionó el mandato. Ahora mismo somos la ciudad que más dedica a gasto social por encima de Vigo.
Las encuestas publicadas en esta legislatura le son por ahora favorables. ¿Percibe en la calle que es posible una mayoría absoluta?
Las encuestas marcan tendencias y han sido positivas hasta ahora, sobre todo si tenemos en cuenta que somos un gobierno en minoría. Creemos que todos juntos avanzaremos en desarrollar una ciudad más amable, más sostenible, más humana, una ciudad que ha sido líder y merece recuperar ese liderazgo en Galicia y en el noroeste peninsular. Evidentemente yo aspiro a revalidar el gobierno con el mayor apoyo posible, un gobierno que a la vista de esas encuestas los ciudadanos lo apoyan.
No quisiera terminar la entrevista sin preguntarle por la llamada guerra cultural, porque es evidente que el Ayuntamiento de A Coruña realizó estos años muchas acciones de apoyo al feminismo y al colectivo LGTBI. Ante los avances electorales de la ultraderecha y su discurso crítico con estos movimientos sociales, ¿cree que hay riesgo real de una involución de los derechos de las mujeres y otros colectivos?
No es nuevo.Tradicionalmente la derecha ha luchado contra el avance en derechos sociales y concretamente los que se refieren a la igualdad de derechos de la mujer. Es la hipocresía natural que tiene la derecha en este país: recurrían la ley del divorcio y luego se divorciaban, recurrían la ley del matrimonio homosexual pero luego van todos juntos a la boda de Javier Maroto, recurrían la ley del aborto cuando llevaban a sus hijas abortar a Londres.
En fin, cada vez que esté país avanzó en derechos y libertades siempre ha sido de la mano de gobiernos de izquierda que se ha topado con la derecha más rancia, intentando parar esas conquistas en el Tribunal Constitucional o con manifestaciones en la calle.
Es tremendo que incluso estuvieran en contra de la Ley Integral contra la Violencia de Género. A las mujeres se nos mata por el hecho de ser mujeres. Las cifras de mujeres asesinadas es algo intolerable en un país democrático y civilizado y aún así estaban en desacuerdo. Tenemos una fuerza de ultraderecha que pacta al Partido Popular, que le da gobiernos del Partido Popular , y que niega la violencia machista. El mismo presidente nacional del Partido Popular, el actual, que conocemos muy bien aquí, no llevaba ni 48 horas en Madrid y ya estaba hablando de violencia intrafamiliar, ya estaban blanqueando el discurso de la derecha. Es peligrosísimo, no lo hace ninguna derecha en Europa.
Hace alusión a Feijóo. Cuando le cuestionamos por su queja de ausencia de mujeres entre los relatores del Foro de Montevideo vino a quitarle hierro …
Porque la igualdad para ellos no es importante. Avanzar socialmente hacia un país moderno no tampoco. Están instalados en una mentalidad totalmente involucionista y por lo tanto cuando gobierna la derecha se retrocede en derechos y cuando gobierna la izquierda se avanza Todos los avances sociales y las conquistas de derechos en este país históricamente han venido de la mano de la izquierda. Por lo tanto, sí, claro que existe el riesgo de involución en derechos sociales. Lo estamos viendo allá donde gobiernan, por ejemplo en Castilla y León, donde el Partido Popular gobierna con Vox. Ellos están en contra de las autonomías, están en contra de la inmigración y su discurso caduco de ultraderecha el PP lo abraza y se siente cómodo en él. Mientras estos sean sus compañeros de viaje, no habrá avance social ninguno.
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