El CD Lugo y Saqués se juegan la permanencia a la carta de Rubén Albés
El presidente Tino Saqués da las llaves del equipo a Rubén Albés, el cuarto entrenador del Lugo este curso.
El presidente Tino Saqués da las llaves del equipo a Rubén Albés, el cuarto entrenador del Lugo este curso.
Rubén Albés en su primer entrenamiento con el CD Lugo | Foto: CD Lugo
Fumata blanca en el Carro, la tercera de la temporada. El CD Lugo, que no carburó al principio de temporada con , que despegó con Nafti y que se hundió con Luis César, ha anunciado el cuarto técnico del curso, encargado de revitalizar a un equipo que mira a la cara a los puestos de descenso y que solo ha ganado un partido en lo que va de 2021.
El cuadro lucense solo ha sumado nueve puntos en los cuatro meses que van desde que comenzó el año. Un registro paupérrimo que provocó la destitución de Nafti primero, que había llegado para remplazar a Juanfran y que logró muy buenos resultados en sus primeros partidos al frente del equipo, y de Luis César después, que en su segunda etapa en el Anxo Carro dirigió al conjunto albivermello en ocho encuentros en los que solo sumó tres puntos (tres empates) y apenas celebró tres goles.
Ahora llega el turno de Rubén Albés. El jovencísimo preparador vigués goza a sus 36 primaveras de una amplia experiencia en el fútbol nacional, especialmente por sus etapas en los filiales del Celta de Vigo y Real Valladolid, donde dejó muy buen recuerdo, si bien esta será su primera etapa en la división de plata. Este reto mayúsculo implica remontar una situación que tiene a los gallegos antepenúltimos con 36 puntos, a dos de la salvación que marca el Alcorcón.
A primera hora de la tarde fue anunciado y ya ha dirigido su primera sesión como técnico del Lugo. El sábado espera la Ponferradina en el derbi de los Ancares y los objetivos son claros: recuperar la solidez defensiva que caracterizó a la escudara luguesa en la primera parte de la temporada y mejorar la efectividad de cara a puerta (solo cuatro equipos han metido menos goles que el Lugo) son los deberes de Albés a corto plazo.
A largo plazo, Albés tiene el reto de no formar parte de la historia de la entidad como otra víctima de la trituradora de Tino Saqués. Por delante siete jornadas para lograr el objetivo de que ni Albés ni el Lugo vuelvan a la Segunda División B.
Escribe tu comentario