Hacienda pone en su punto de mira a los que llevan su residencia fiscal a Portugal
El Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) va a estudiar a aquellos contribuyentes españoles que están trasladando capitales a Portugal. La Administración responde así a las noticias de que cada vez son más los que tratan de mudar sus obligaciones tributarias, ante la subida de impuestos a los más ricos anunciadas por el nuevo Gobierno fruto del pacto entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
El Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) va a estudiar a aquellos contribuyentes españoles que están trasladando capitales a Portugal. La Administración responde así a las noticias de que cada vez son más los que tratan de mudar sus obligaciones tributarias, ante la subida de impuestos a los más ricos anunciadas por el nuevo Gobierno fruto del pacto entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias.
Según adelanta hoy El Economista, tanto el Sepblac como la Agencia Tributaria están centrando sus esfuerzos en investigar a los que mudan su residencia fiscal al país vecino, atraídos por los bajos impuestos que ofrecen los lusos a los extranjeros que trasladen allí su residencia y hagan inversiones inmobiliarias, lo que se conoce en el sector como 'visa dorada' de Portugal.
Lisboa | Ullisan CC BY-ND 2.0
Portugal lleva seis años otorgando estas visas a los extranjeros que realicen inversiones de al menos unos 5o0.000 euros. Esto ha estimulado la economía portuguesa, siendo uno de los motores del mercado inmobiliario en Lisboa y zonas turísticas.
Las exigencias portuguesas para acogerse a este régimen son muy asequibles. Basta con residir en Portugal al menos una semana en el primer año y dos semanas días en cada uno de los siguientes dos años.
Ahora bien, las normas españolas fijan que son residentes fiscales en el Estado tanto aquellos que pasen en España más de 183 días como aquellos cuyo principal fuente de ingresos sean actividades o patrimonio situados en el país.
Hace semanas ya que la Asociación Española de Asesores Fiscales advirtió del aumento de consultas de clientes interesados en llevar su residencia fiscal al otro lado del Miño. Este incremento se podría explicar, al menos en parte, por el miedo a la subida de impuestos producto del pacto entre el PSOE y Unidas Podemos, aún por concretar.
El Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) trata de evitar durante estas 'mudanzas' se regularicen capitales ocultos durante años al fisco español; y la Agencia Tributaria evitar que españoles residan fiscalmente en Portugal cuando las normas de doble imposición les obligan a tributar en España.
El sistema de 'visas doradas' de Portugal abre la puerta incluso a conseguir la ciudadanía portuguesa después de seis años. Un beneficio que también está disponible para inversores extranjeros que fijen su residencia en España, pero con condicionantes y tributos menos ventajosos que el sistema luso.
El Sepblac es un órgano inter-agencia en el que, bajo una dirección única, desempeñan sus funciones profesionales de cinco instituciones del Estado: Ministerio de Economía y Empresa, Banco de España, Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT), Policía Nacional y Guardia Civil.
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