Santiago: el PSOE de Bugallo intentará gobernar en solitario

Paralizar los presupuestos participativos y descartar la fusión con Teo son dos de las medidas ya anunciadas por el que será nuevo primer edil de la capital de Galicia

El ganador de las elecciones municipales en Santiago, el socialista Xosé A. Sánchez Bugallo, ha avanzado que el PSOE se plantea gobernar la capital gallega en solitario, aunque apela a establecer contactos antes con el resto de fuerzas que han logrado representación en la corporación compostelana --PP, Compostela Aberta y BNG--.

Bugallo ha comparecido ante los medios en la mañana de este lunes en la sede de campaña del PSOE santiagués, donde en la noche del domingo se festejó hasta entrada la madrugada la recuperación de la Alcaldía de la capital de Galicia tras ocho años en la oposición, los cuatro últimos tras cosechar el peor resultado de su historia en la ciudad.

RONDA DE CONTACTOS

Tras reconocer que había dormido "poco" y bromear con que tendrá que "contratar a una secretaria" para atender el gran volumen de felicitaciones recibidas en las últimas horas, el que fuera regidor de Santiago entre 1998 y 2011 ha avanzado que iniciará una ronda de contactos con Compostela Aberta, PP y BNG para "incorporar" su proyecto de ciudad en la acción del futuro de gobierno.

Con todo, asegura que la agrupación socialista no tiene la decisión tomada de regir el ayuntamiento en solitario o incorporar a otra formación en un gobierno de coalición. "No tenemos un objetivo ni una decisión totalmente tomada", ha incidido Bugallo.

A continuación, se ha abierto a tender puentes con el Partido Popular, a quienes atribuye el papel "natural" de "liderar la oposición", pero eso "no quita" que los socialistas puedan llegar a "puntos de coincidencia" con los populares.

"NO SOMOS NOSTÁLGICOS DEL PASADO"

"No somos nostálgicos del pasado", ha remarcado Sánchez Bugallo, que tras un paréntesis en su carrera política después de finalizar su etapa como diputado autonómica volverá a ser alcalde del municipio que gobernó durante casi 12 años hasta 2011, cuando perdió el bastón de mando ante el PP de Gerardo Conde Roa.

"Vengo a la alcaldía de Santiago para servir a los ciudadanos de Santiago, no hay otro proyecto", ha insistido, para a continuación subrayar que quiere representar "a todos" los vecinos de la ciudad "tengan la ideología o las creencias que tengan". "El día 15 (de junio) seré investido como alcalde de Santiago, no como alcalde socialista", ha apostillado.

ENTREVISTAS

De este modo, ha avanzado que entre sus primeras acciones una vez asuma el bastón de mando será solicitar entrevistas con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; con el rector de la USC, Antonio López; y con el arzobispo de Santiago, Julián Barrio. "La tradición es esa, yo la voy a respetar", ha apuntado.

Además, ha asegurado que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, encontrará en él "un leal colaborador institucional". 

"No encontrará en mí un competidor ni tampoco un subordinado", ha añadido, antes de resaltar que será exigente con el Gobierno central de Pedro Sánchez a la hora de reclamar asuntos de la ciudad como la construcción de la depuradora.

TRANSICIÓN DE PODER

Así las cosas, Bugallo pretende sentarse en los próximos días con el regidor saliente, Martiño Noriega, para avanzar en el traspaso de poder. Así, pedirá al de Compostela Aberta que paralice la convocatoria de los Presupuestos Participativos para 2020, una de la medidas 'estrella' del gobierno de la marea compostelana.

La fusión con el municipio de Teo, otra de las propuestas planteadas por Compostela Aberta durante la campaña, queda totalmente descartada para el gobierno que sale de las urnas, que apostará por "trabajar en la colaboración" con los ayuntamientos del entorno para mejorar asuntos como el transporte en la comarca.

"No nos planteamos ninguna fusión. No queremos que ningún ayuntamiento mire a Santiago como si tuviese un afán expansionista", ha subrayado Sánchez Bugallo, que fija como "retos" para el mandato preparar el Xacobeo 2021, afrontar la situación de los servicios municipales y "diseñar el futuro Santiago" para la próxima década.