Solicitan el apoyo de los rectores de las Universidades españolas y portuguesas.
En un acto de marcado carácter protocolario, ni el presidente ni los rectores ni el titular de Educación se han fijado plazos.
"Sin explicaciones y con carácter retroactivo", los contratos predoctorales pasan a ser de prácticas. Los rectores piden una regulación laboral específica.
Es la intención de los rectores, que defienden un examen "reconocido en toda España que no rompa el distrito universitario único".