El Partido Popular de Galicia prometió tras los cientos de muertes de la pandemia cambiar las normas de las residencias pero se ha opuesto a su modificación a nivel estatal. Los nuevos centros no podrán tener más de ciento veinte plazas lo que puede ayudar a contener los brotes masivos que se produjeron en las primeras olas del coronavirus.
Sindicatos han señalado, a raíz de los datos del paro registrado publicados este miércoles, que "la tan publicitada mejora de la economía no llega" al mercado laboral gallego, donde se dio la segunda mayor subida del número de desempleados por comunidades en noviembre respecto a octubre.