El ejército israelí lanza un aviso: los residentes en el sur del Líbano deben abandonar sus domicilios ante el inminente ataque sobre infraestructuras donde, aseguran, hay guardadas armas pertenecientes al grupo terrorista. Es la respuesta a los ataque recibidos sobre Haifa de las últimas horas, la réplica de Hezbolá a la detonación de sus aparatos de comunicación.
El número de muertos según el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza alcanza los 29.410, con unos 8.000 desaparecidos todavía.
La situación continúa evolucionando, y se teme que esta escalada pueda tener graves consecuencias humanitarias
En las últimas horas los bombardeos en territorio palestinos se han intesificado y la población civil, a través de sus teléfonos móviles, se ha hecho eco de las consecuencias de los ataques desde territorio israelí. El Gobierno de Netanyahu avanzó que la guerra será "larga" y "difícil", lo que hace vislumbrar un alto coste de vidas humanas en los dos bandos.
Participan en una visita de una semana y tenía previsto entrar junto a la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos.