La quita de la deuda empieza a agrietar el PP y Rueda no descarta ahora pedirla para Galicia

La propuesta del Gobierno central de condonar parte de la deuda autonómica ha generado tensiones internas en el Partido Popular a nivel estatal y también en Galicia. Mientras la dirección regional rechaza la medida, algunos miembros del partido la ven como una oportunidad para la comunidad.

Alfonso Rueda, presidente de la Xunta, ha calificado la propuesta como un "negocio ruinoso" para Galicia, argumentando que solo supondría un ahorro anual de 42 millones de euros en intereses. Rueda insiste en que la prioridad debería ser la reforma del sistema de financiación autonómica, no la condonación de deuda. Sin embargo, hoy ha añadido que, cuando la norma llegue al Congreso, habrá que revisar los detalles para ver si Galicia sinalmente solicita o no la condonación. 

En los mismos términos se ha pronunciado la portavoz del PPdeG. Paula Prado ha dicho, por una parte, que la condonación es parte de un "carnaval independentista" pero por otra indicó que habrá que estar pendiente de la "letra pequeña" antes de evaluar finalmente qué va hacer el Gobierno de Galicia. Es decir, ni Rueda ni Prado descartan totalmente que la Xunta pida la quita si, finalmente, sale adelante en el Congreso de los Diputados.

ABANDONO DE LA REUNIÓN

Ayer, en un gesto de protesta, los consejeros de Hacienda de las comunidades gobernadas por el PP abandonaron la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) celebrada ayer en Madrid. Miguel Corgos, consejero de Hacienda de Galicia, actuó como portavoz del grupo, declarando que no serían "cómplices de las cesiones permanentes al independentismo".

Sin embargo, la salida de los representantes del PP no impidió que la reunión continuara, ya que el Gobierno solo necesitaba el respaldo de una comunidad autónoma para aprobar la medida, como finalmente tuvo lugar.

El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha aprobado la propuesta del Gobierno de condonar 83.252, más de 4.000 a Galicia, millones de euros de deuda de comunidades autónomas del régimen común pese a que los consejeros del Partido Popular abandonaron la reunión poco después de empezar.  Ahora queda pendiente su tramitación parlamentaria y la reacción de los gobiernos regionales.

Algunos miembros del PP gallego ven la propuesta con otros ojos. Argumentan que la condonación de 4.010 millones de euros reduciría la deuda pública de Galicia en un 33%, liberando recursos para áreas como sanidad, educación y vivienda. El propio 

DEBATE SOBRE EL IMPACTO REAL

Ana Pontón, líder del BNG, ha criticado la postura de Rueda, acusándolo de "sumisión" a la dirección nacional del PP. Por su parte, José Ramón Gómez Besteiro, secretario general del PSdeG, ha instado a Rueda a reconsiderar su posición y aceptar la propuesta.

El debate se centra ahora en el verdadero impacto de la medida para Galicia. Mientras Rueda afirma que cada gallego asumiría 220 euros adicionales de deuda la oposición sostiene que la condonación liberaría miles de millones para inversión pública.

La controversia sobre la condonación de deuda autonómica promete continuar, reflejando las complejas dinámicas políticas y económicas que enfrenta Galicia en el contexto nacional. Algunas comunidades bajo gobiernos del PP también verían con buenos ojos beneficiarse de esta medida a la que se opone Génova. El PSOE, por lo tanto, parece que está logrando finalmente su objetivo político de abrir una brecha entre los conservadores y así poner en solfa la robustez del liderazgo de Alberto Núñez Feijóo.

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha defendido este jueves que el debate sobre la propuesta de condonación de deuda que ha trasladado a las comunidades autónomas "no puede sustituir" al de la reforma del modelo de financiación autonómica que su departamento sigue "promoviendo".