¿Pueden los abogados del turno de oficio ir a la huelga? "Tenemos un pleito para dignificar nuestro trabajo"

Una pieza básica un fundamental de la Justicia, pero tratada como mano de obra esclava. Ese es el sentido de los abogados del turno de oficio, los que defienden a todas esas personas sin recursos y que ahora salen a la calle en defensa de sus propios derechos. 

La abogada Rosa María Lozano, delegada en A Coruña del sindicato de abogados VENIA, es una de las profesionales que encabeza este movimiento y explica para Galiciapress los motivos de las protestas, los objetivos que perisguen y el sentir de un colectivo que se muestra muy unido.

Con un sueldo de "40 y pico céntimos la hora" en las guardias de 24 horas o con compañeras "recién paridas y con sus bebés asistiendo a procesos verbales" por la precariedad que sufren, los abogados han dicho basta: "Nos abocan es al cierre de los despachos pequeños, de los autónomos que no pertenecemos a grandes firmas".  

Letrados de la Administración de la Justicia, Funcionarios de la Administración de la Justicia, jueces, fiscales… Son tantos actores del mundo de la Justicia que están reivindicando sus derechos que miles de procesos se están viendo afectados, provocando retrasos y colapsos en los juzgados. En este escenario de caos judicial, ahora son los abogados del turno de oficio los que sopesan ir a la huelga, y no con el objetivo principal de conseguir mejoras salariales, sino de reivindicar una profesión digna y con mayor reconocimiento. 
 

De momento, se han celebrado distintas asambleas en el país para que los juristas pongan en común sus sensaciones y, aunque la posibilidad de los paros sigue sobrevolando el sector, por ahora hay un llamamiento para todos los letrados de Galicia de cara a participar en una protesta el próximo 19 de mayo, a las 12 horas, delante del Parlamento de Galicia.

Después de la asamblea celebrada el lunes en la sede del Colegio de Abogados de A Coruña las opciones de llegar a la convocatoria de huelga parece que crecen a medida que crece el descontento de estos profesionales. Rosa María Lozano, delegada en A Coruña del sindicato de abogados VENIA, celebra la gran acogida que tuvo el encuentro del lunes, con “cerca de un centenar de compañeros” que “abarrotaron el salón de actos”. 
 

“Un exitazo”, festeja. Se trata de un primer paso para sentar las bases de todas las reivindicaciones que buscan plantear en pro de subsanar las carencias que acosan a diario a los abogados del turno de oficio. “Hay muchísimo interés. Se aprobaron las reivindicaciones y todas buscan dignificar nuestra profesión. De hecho, hay tanta predisposición que se aprobó la celebración de una nueva asamblea dentro de 15 días para poner en común los avances que se vayan dando”, explica Lozano sobre la situación de este gremio. 

¿PUEDEN IR A LA HUELGA LOS ABOGADOS DE OFICIO?

Los grupos de trabajo que se constituyeron en la asamblea están estudiando ahora todas las posibilidades, ya que la opción de ir a la huelga tiene sus propios entresijos legales. “Están realizando un estudio jurídico y viendo qué posibilidades tenemos. Buscamos la forma que menos perjudique a los ciudadanos y que sea completamente legal, porque algunos sectores consideran que como abogados de oficio no tenemos ese derecho”, puntualizan desde VENIA. Las alternativas por ahora están siendo escudriñadas con minuciosidad, pero desde el sindicato advierten que “podría darse un paro generalizado”. 

Con huelga o sin ella, en el sector tienen claro que las negociaciones con las administraciones públicas, ya sea con el Gobierno de España o con las comunidades que tengan transferidas las competencias en materia de Justicia, cuentan con unas líneas rojas a las que de ninguna forma están dispuestos a renunciar. 

El primer elemento clave es “la redacción de un Estatuto Jurídico del Abogado del Turno Oficio”. En este texto debe detallarse qué relación tienen con las administraciones públicas. “Queremos saber qué somos, si somos personal estatutario o a qué categoría pertenecemos”, reivindica Lozano. 

Otro punto es que se contemplen “todas las actuaciones que realizamos en nuestro servicio, porque hay asuntos que nos obligan a realizar pero no nos pagan, y que las remuneraciones sean dignas”. No es en este caso, dicen, como el conflicto de los LAJ o de los jueces y fiscales, que reclaman incrementos salariales, sino “de dignificar el salario”. Así, Lozano pone de ejemplo las guardias de 24 horas, que se cobran a “40 y pico céntimos la hora de media”. 

“Queremos que se redacte un nuevo baremo en el que se considere que estos profesionales realizan una función tan importante como es la asistencia jurídica gratuíta a aquellos que no tienen medios se les pague de una forma digna”, destacan desde VENIA, sobre “multitud de otros aspectos que reivindicamos pero que también buscan el reconocimiento de nuestros derechos”. “Es muy triste que nuestro trabajo consista en solicitar el reconocimiento de los derechos de los demás y somos una de las profesiones con menos derechos reconocidos”, lamenta.

Otro ejemplo del desamparo al que se enfrentan en muchas ocasiones tiene que ver con la salud, ya que los abogados del turno de oficio “no pueden ponerse enfermos”. “No se nos suspenden los plazos de los procedimientos. Que se suspenda una vista va a depender de la consideración del juez o jueza que lleve el caso. Algunas compañeras han tenido que asistir recién paridas y con el bebé a un procedimiento verbal”.
 

“HEMOS SIDO MUY PACIENTES, YA ESTÁ BIEN”

“Se tratan de reconocimientos básicos, por eso hay tanta indignación”, reprocha Lozano. En esa línea, el enfado es todavía mayor en el sector porque consideran que el trato que están recibiendo los jueces y fiscales a la hora de negociar con el Ministerio de Justicia está siendo mucho más amable que el que tuvo la administración en su día con los LAJ o con los propios abogados del turno de oficio.

“Vemos que a todos les suben los sueldos, que se les mima como si fuesen de primera categoría… Hemos sido muy pacientes, pero ya está bien. Somos una pieza básica de la Justicia y se nos trata como a esclavos”, critica, que hace extensible la denuncia a todas las administraciones públicas, entre ellas la Xunta de Galicia. 

“No se trata de un color político concreto, sino de todas las instituciones que han estado abusando de la buena fe de los letrados, que nos apuntamos al turno de oficio porque es una parte fundamental, pero que entendemos que ha de ser remunerado, como a los médicos y otros sectores primordiales del servicio público”, comenta Lozano.

Su situación es más delicada todavía si consideramos que, a diferencia de otros grupos, la carga de trabajo de estos profesionales se vio sensiblemente reducida en los últimos tiempos, lo que afectó a los emolumentos que percibían muchos trabajadores. La pandemia provocó una parálisis total y los dos meses de huelga de los LAJ los devolvió a ese escenario. Con los paros de jueces y fiscales en el horizonte, todo puede complicarse todavía más en muchos hogares.

“Sufrimos mucho. Muchos compañeros tuvieron que cerrar sus despachos, porque aunque se pare la Justicia hay que seguir pagando al Colegio de Abogados, la Seguridad Social… Y en pandemia, los que estábamos de alta como autónomos percibimos ayudas del Gobierno, que nos permitían pagar los locales que no usábamos. Pero los compañeros de la mutua no solo no fueron ayudados, sino que la mutua les siguió cobrando durante la crisis sanitaria. Incluso la única ayuda propuesta por la Xunta para los trabajadores del turno de oficio de 300 euros por abogado fue rechazada porque los representantes del Consello de Abogacía Galega consideraron que ese pago debía hacerse o a todos los abogados o a ninguno. Y salió que a ninguno”, relata Lozano. 

“Hacia lo que nos abocan es al cierre de los despachos pequeños, de los autónomos que no pertenecemos a grandes firmas”, augura Lozano. Sin embargo, todavía hay esperanza, la que demuestra la unidad de un sector que se ha volcado en esta batalla y que parece decidido a ganar este caso: “Tenemos un pleito, pero los clientes somos nosotros, y tenemos a los mejores especialistas”.