​La Diputación de Ourense pide declarar zona catastrófica los viñedos afectados por heladas

// @En_Marea

La Diputación de Ourense ha reclamado por unanimidad este viernes que se declare zona catastrófica el territorio afectado de cuatro denominaciones de origen gallegas a las que las heladas han arrasado buena parte de sus viñedos.

En una moción de urgencia llevada al pleno de la Diputación este viernes por el PP --y apoyada por el resto de los grupos-- se demanda a la Xunta que solicite la tramitación como zona catastrófica de este territorio de producción vitivinícola.

Además, esta iniciativa pide a la Xunta una línea de ayudas para paliar daños que afectan a buena parte de las cosechas de las denominaciones de origen de Monterrei, O Ribeiro, Valdeorras y Ribeira Sacra.

Al respecto, Ana Villarino (PP) se ha referido al "efecto devastador" de esta helada, que "los más antiguos" comparan con 1942, el conocido como el "año del hambre", y que ha supuesto un "golpe bien duro" para el sector.

"HELADA NEGRA"

A esta moción ha presentado una enmienda a viva voz el PSOE durante la celebración del pleno en la que se pedía también que la Diputación de Ourense abra una línea de ayudas específicas, más allá de las que puedan implementar otras administraciones. Cuestión que no han aceptado los populares.

Por su parte, Francisco Fraga (PSOE) ha explicado la necesidad de que la Diputación dote ayudas ante la posibilidad de que la declaración de zona catastrófica "se encuentre con el argumento de que son bienes asegurables".

En esta línea, Fraga lamenta las consecuencias de una "helada negra", mientras avisa de que se prevé que esta helada pueda seguir afectando en próximos días a vides y brotes.

Asimismo, Armando Ojea (Democracia Ourensana) ha remarcado la "gravedad de estos hechos", a la vez que defiende que "en estas clase de cosas es en la que hay que gastar el dinero".

Finalmente, Ramiro Rodríguez (BNG) se ha mostrado a favor de la iniciativa, pero considera que se debe tener en cuenta previamente a los afectados con el fin de que "el decreto que se apruebe sea el más adecuado".

AYUDAS "SI SON NECESARIAS"

La conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, ha mostrado su "preocupación" por los daños ocasionados por la helada en los viñedos de cuatro de las cinco denominaciones de origen gallegas, por lo que avanza que ahora toca evaluar los estragos y garantiza que habrá ayudas para los afectados sin son necesarias.

Así, la conselleira asegura que la Xunta "va a estar presente" y "va a tomar medidas", mientras deja claro que "la Consellería siempre está ahí en el campo de las ayudas".

En declaraciones este viernes en Salceda de Caselas (Pontevedra), la conselleira de Medio Rural ha subrayado que ha abordado con alcaldes, las denominaciones de origen, así como viticultores que le han trasladado su "inquietud".

Ante esto, Ángeles Vázquez asegura que hay técnicos de Medio Rural que están en la zona para hacer una evaluación de los daños, y espera que a través de trabajos fitosanitarios y estudios se pueda "recuperar al menos un poquito" de la producción, si bien reconoce que hay zonas que fueron arrasadas al 100%".

Aunque explica que muchos productores tienen asegurada la cosecha, indica que estos daños se trasladan al resto de la cadena, lo que "va a suponer que no haya transformación del producto y haya menos vino".

72 MILLONES DE PÉRDIDAS

Por su parte, el sindicato Unións Agrarias (UU.AA.) cifra en 72 millones de euros los daños por la helada, con la pérdida de 16,3 millones de uva que supone que no llegarán al mercado 21,7 millones de botellas de vino.

En concreto, Monterrei ha sido la denominación más afectada en relación a su producción, con una incidencia en el 95% de la cosecha y casi 800.000 euros en pérdidas de uva. A continuación se encuentra el 80% de las vides de la denominación de origen de Valdeorras afectadas y pérdidas de 2,9 millones de euros en uva.

Por su parte, en Ribeiro los daños afectan al 75% de los viñedos, con la mayor repercusión económica, de 7,2 millones de euros en pérdidas, mientras que en Ribeira Saca alcanzan al 60% y se valoran en 3,1 millones de euros.

A estos daños hay que añadir los gastos derivados de recuperación de las vides mediante podas en verde y aplicación de cicatrizantes que ascenderán a 2,2 millones de euros, que de forma inmediata tendrán que desembolsar los productores para intentar salvar las explotaciones.