Las denuncias de UGT en la Estación de Ourense motivaron la apertura de un procedimiento sancionador, que ahora podría tener lugar en las instalaciones de A Gudiña.
La seguridad de las estaciones de tren corre a cargo de la empresa concesionaria Grupo Control, que culpa a Adif por la falta de infraestructuras para el personal en terminales como la de Ourense.