Alemania impide que la Unión Europea emita deuda avalada por el conjunto de países. Ahora bien, Angela Merkel cede en otros puntos para facilitar que España, Italia y otros países más afectados puedan recibir dinero prestado sin que a cambio tengan que ejecutar los durísimos recortes impuestos por Bruselas tras la crisis del ladrillo.
Nunca la Europa de dos velocidades se había visto tan clara en las conversaciones o discusiones, llámenlas Vds. como deseen, que mantienen esta semana los líderes de la Unión Europea