La decisión del gobierno municipal de Teo de adquirir una nave industrial abandonada para convertirla en el futuro centro de día ha desatado una controversia política en el municipio coruñés. El Bloque Nacionalista Galego (BNG), principal partido de la oposición, cuestiona tanto el método de adquisición como la idoneidad del inmueble para este fin.
Contará con 96 plazas de residencia y 40 para el centro de día, una demanda histórica de los vecinos desatendida por la Xunta.