Ultimátum de Guidetti al Celta
Guidetti selebrando un gol junto a Emre Mor. RC Celta
El ariete sueco del Celta de Vigo, John Guidetti, se encuentra concentrado con la selección de Suecia a la espera de disputar la ida de la repesca mundialista ante la selección italiana. Seguramente se trate del duelo más atractivo de esta semana de selecciones por lo que las dos históricas selecciones europeas ponen en juego: el pase a la Copa del Mundo de Rusia. Pero Guidetti no ha dejado pasar la oportunidad de mandar un mensaje a su club, en donde esta temporada no está gozando del protagonismo que cree merecer.
“La situación no es sostenible, no es buena, no estoy contento con ella” afirmó el delantero sueco desde la concentración del Wunderteam. Con solo 52 minutos jugados en lo que va de liga, la presencia del artillero sueco en el esquema de Unzué es testimonial. Relegado al banquillo, Guidetti ha aprovechado sus minutos en Copa del Rey para demostrar que está capacitado para asumir un rol protagonista. “Cuando juego, lo hago bastante bien. Más no puedo hacer” lamentaba ante los medios.
En su tercera temporada en el Celta, SuperGuidetti se ha visto obligado a ocupar un sitio en el banquillo por la llegada de Maxi Gómez, que a principio de curso aportó un rendimiento goleador realmente provechoso para el cuadro celtiña, y por la lesión que sufrió a principio de temporada y que lo tuvo cerca de un mes parado. Sin embargo, su carisma y compromiso con el club y la ciudad olívica, han convertido a Guidetti en uno de los jugadores más queridos por la parroquia celeste, llegando a ser uno de los nombres más aplaudidos y aclamados por Balaidos desde su llegada. Pero esta vez, el nueve ha dejado claro que si su situación no se revierte en las próximas semanas, podría abandonar el club en enero en busca de minutos.
Con 25 años, el Celta es el séptimo club del escandinavo, que llegó a Vigo como una estrella que nunca llegaba a demostrar todo su talento. En Balaidos encontró su hábitat ideal y, aunque no es su prioridad, Juan Carlos Unzué no quiere desprenderse del talento nórdico, con una clausula de 25 millones. Tampoco el vestuario está por la labor de dejarlo marchar. Fontás salió a apagar el incendio provocado por las declaraciones de John afirmando que vienen de un jugador “de sangre caliente. Es egoísta como todos. Todos queremos jugar y estoy seguro que Guidetti nos va a aportar muchísimo”.
Ahora, Guidetti solo tiene la cabeza en lograr el billete a Rusia derrotando a Italia en los partidos de sábado y lunes. La pelota está en el tejado del Celta, que debe valorar si el punta merece más minutos. En Vigo esperan que el tema se solucione y el amor entre Guidetti y el Celta no muera en enero. Como reza la canción que suena cada vez que el sueco hace gol “Johnny G, Johnny G, will you marry me”. Si fuese por los hinchas celestes, sería un amor que duraría hasta que la muerte los separe.
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