"Vuelve el que tiene morriña, no el que quiere trabajar"
Los científicos españoles emigrados valoran que en España "no hay futuro" porque "no hay inversión".
El Centro Europeo de Investigación Nuclear (CERN) en Ginebra (Suiza) se ha convertido en los últimos años en una "puerta de salida" para varios de los españoles que han tenido que abandonar el país por la crisis económica. Aproximadamente, entre 300 y 400 españoles desarrollan su carrera profesional en esta institución europea, sede de varios descubrimientos y avances científicos en las últimas décadas, como el hallazgo del bosón de Higgs o la creación de la World Wide Web (www).
Entre ellos, se encuentra el ingeniero industrial eléctrico Carlos Gascón, que trabaja en el departamento de seguridad HSE del CERN, quien ha afirmado que la actual situación a hecho que los científicos se sientan "atrapados" en el extranjero. "Vuelve el que tiene morriña pero el que quiere trabajar, no, porque no hay inversión y por tanto, no hay trabajo; y si lo hay, no está remunerado ni considerado como otras profesiones. No hay futuro", ha recalcado.
Gascón ha señalado que "la imagen de los científicos españoles es muy buena; con poco se buscan la vida y son muy competentes, pero todo es esfuerzo humano, no apoyo de España, y los que pueden quedarse, se quedan". "Sin embargo, Alemania o Inglaterra que invierten mucho, tienen un retorno importante", ha subrayado.
En la misma línea, el investigador Luis March, trabajador en el acelerador ATLAS y contratado por la Universidad de Ginebra, ha indicado que "Alemania, Reino Unido, e Italia tienen una cultura científica mayor que España y, a pesar de la crisis, siguen apostado por la ciencia". "El nivel académico de las universidades españolas es bastante elevado comparado con otros países, de manera que la gente sale muy bien formada. Sin embargo, a nivel de instalaciones estamos muy retrasados y necesitamos más inversión", ha apuntado.
MENOS INVERSIÓN, MENOS BECAS
"Obviamente, ha habido recortes en los proyectos y está más limitado todo --ha explicado el científico en el ATLAS-- Hay menos inversión, por tanto, hay menos número de becas, y si tú quieres volver, tienes menos posibilidades".
March comenzó a estudiar la carrera en 1997 y, posteriormente, continuó su formación con trabajos en la Universidad Autónoma de Madrid y el CSIC. "A veces pienso que el dinero invertido en mí, si no puedo volver a España, lo podían haber invertido en otra cosa. Habría que plantearse si interesa o no formar tanto a la gente, si luego no le puedes dar una salida", ha indicado.
"No se entiende que la ciencia no es como la bolsa, que invierto y en tres días gano el triple. Esto es: invierto hoy y de aquí a unos años recojo los frutos, pero es a largo plazo", ha explicado.
El investigador ha señalado que si vuelve a España no tendría posibilidad de continuar. "Te planteas si dar el paso o no, porque a eso se suma que te vas viendo mayor y que te contraten en una empresa se va haciendo mas difícil", ha declarado.
UN DINERO QUE SE VA
Por su parte, el investigador postdoctoral en el Gran colisionador de hadrones (LHC) Héctor García se encuentra contratado por la Royal Holloway - Universidad de Londres. Así, García, doctor en Física por la Universidad de Barcelona, con máster en acelerador de partículas, ha afirmado que su formación "la subvencionó prácticamente toda el Estado". "Hay un dinero que se va y es una pena que no se aproveche y que hoy, en mi caso, está siendo rentabilizado por Reino Unido", ha explicado.
El científico del LHC ha indicado que "los políticos infravaloran el poder de la ciencia". "Por supuesto que es necesario un Ministerio de Ciencia y no entiendo que haya pasado a una Secretaría del Ministerio de Economía, que no tiene nada que ver --ha apuntado García-- Si tanto nos llenamos la boca con que la ciencia y la tecnología tiene que ser el motor de un país, porqué hay un Ministerio de Industria que, aunque es un pilar básico, es el segundo paso ya que viene después de la investigación".
En cualquier caso, García ha señalado que la crisis le afectó "de forma positiva" porque ha acabado trabajando el en CERN. "Para un físico es lo más; es el laboratorio más grande del mundo, y es como un parque al que vienes a jugar y a pasártelo bien con sus momentos de estrés", ha señalado García, al tiempo que ha reconocido que, si quisiera volver a España, "sería una misión complicada".
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