Citada al juzgado una trabajadora de la residencia Domus Vi de A Coruña por robar a ancianos
Informan que la mujer se llevaba las joyas de los residentes para venderlas después. Por el momento, la dirección del centro sabe que hay tres damnificados, pero no descartan que puedan aparecer más. La acusada tendrá que compadecer ante el juzgado de Instrucción 3 de A Coruña por los hurtos que se le atribuyen. Archivo: EuropapressLa mujer, reconocida con las iniciales O.A.P.,fue acusada de robar los objetos de valor de las personas mayores a las que cuidaba. Las denuncias surgieron tras ser descubierta vendiendo los susodichos materiales. En ese instante, las fuerzas de seguridad la descubrieron vendiendo una pieza de elevado valor económico y, aseguran, no fue el único elemento que llevó al establecimiento de compra-venta. Trabajaba en la residencia Domus Vi en el barrio de Matogrande, según informó La Voz de Galicia esta mañana. Los principales afectados son los ancianos que ya no tienen sus pertenencias.
Informan que la mujer se llevaba las joyas de los residentes para venderlas después.
Por el momento, la dirección del centro sabe que hay tres damnificados, pero no descartan que puedan aparecer más.
La acusada tendrá que compadecer ante el juzgado de Instrucción 3 de A Coruña por los hurtos que se le atribuyen.
Archivo: Europapress
La mujer, reconocida con las iniciales O.A.P.,fue acusada de robar los objetos de valor de las personas mayores a las que cuidaba.
Las denuncias surgieron tras ser descubierta vendiendo los susodichos materiales. En ese instante, las fuerzas de seguridad la descubrieron vendiendo una pieza de elevado valor económico y, aseguran, no fue el único elemento que llevó al establecimiento de compra-venta.
Trabajaba en la residencia Domus Vi en el barrio de Matogrande, según informó La Voz de Galicia
esta mañana. Los principales afectados son los ancianos que ya no tienen sus pertenencias. Según este mismo medio, algunos de ellos declaraban que el daño no se puede compensar cuando el valor de los objetos era sentimental, no económico.
Además, señalaban que han dividido las denuncias en varios hurtos, en vez de catalogarlo como un robo más grande, por lo que estiman que la condena sea una pequeña multa. La trabajadora tenía un contrato fijo en la residencia, pero fue despedida ipso facto tras lo sucedido.
Uno de los hurtos fue una cadena de comunión que una señora, residente en el Domus Vi, llevaba siempre encima por ser de su hijo. El objeto no se pudo recuperar, pues el local de compra-venta de oro sólo retiene los objetos enteros durante un mes. Una vez pasado ese tiempo, el oro pasa a ser fundido para venderlo posteriormente.
No obstante, el acuerdo de conformidad ofrece a la afectada 350 euros por la joya valorada en casi mil euros. Están abrumados con la situación y se temen que no se vaya a resolver pronto. Otros ancianos, en cambio, han tenido mayor fortuna y han podido recuperar sus pertenencias a tiempo.
Domus Vi aseguró que no descartan indemnizar a los perjudicados que, por el momento, se saben que son tres. Sin embargo, indicaron que pueden aparecer más las víctimas de hurtos, pero eso es algo en lo que aún están trabajando.
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