Cómo mejorar la vida de tu mascota

Los perros, al igual que los humanos, necesitan de ciertos hábitos para mantenerse saludables y en forma

Mejorar la vida de tu mascota siempre es posible por medio del ejercicio regular y una alimentación  adecuada, aunque también hay otros factores que pueden ayudar a mejorar su calidad de vida considerablemente. Dependiendo de si se vive en ciudad o en el campo, los hábitos del perro pueden variar, por supuesto el estilo de vida de los humanos a cargo también influye considerablemente.

No obstante, algo que a veces se olvida pese a su importancia, es que lo ideal es contar con un seguro de mascota en cualquiera de las opciones posibles, como las que ofertan aseguradoras como Verti para que se haga cargo de los posibles costes que conlleven sus revisiones o problemas de salud. De esta forma tu perro cuenta con la mejor asistencia sin ninguna otra preocupación.

Y es que a medida que los años pasan, el organismo de tu perro sufre un desgaste a tener en cuenta, exactamente igual que nos ocurre a los seres humanos. Por este motivo, agregar hábitos saludables en sus  rutinas diarias, así como una alimentación adecuada según su estilo de vida, es algo que se torna imprescindible.

Consejos para cuidar mejor de tu perro

Empezando por la alimentación, mantener porciones y horarios regulares y adecuados es fundamental. Un buen alimento que proporcione a tu mascota los antioxidantes y prebióticos necesarios, además de los nutrientes básicos lo ayudarán a tener un estado óptimo de salud y a mejorar y alargar su vida.

Para conseguir esto lo mejor es darle a la mascota el pienso adecuado a su edad, peso y características. Hay que tener en cuenta si tiene alergias, problemas de piel y pelaje, cómo está su sistema inmunológico, etc. Un veterinario puede ayudar a recomendar el tipo de alimentación que más conviene a cada mascota. Eso sí, no es conveniente en ningún caso darle de comer lo mismo que se consume en casa. La dieta humana no es saludable para la familia canina, sobre todo si se tiene en cuenta la cantidad de azúcares y procesados que contiene la mayoría de los alimentos hoy en día.

La higiene es otro factor muy importante, pero no solo la higiene de su físico, sino también de su entorno. Hay que bañar a la mascota con la regularidad que recomiende el veterinario según su raza y características propias. Los dientes, las orejas, las almohadillas plantares, etc. Son partes de su cuerpo a los que hay que prestar especial atención si se quieren mantener limpios y sanos.

Por otra parte, la limpieza doméstica repercute directamente en la higiene de la mascota, su confortabilidad e higiene son necesarias. Hay que limpiar periódicamente su cama, cojín, juguetes y todo lo que la mascota use diariamente para evitar bacterias y posibles infecciones que pudieran causarle malestar o enfermedad.

Ni que decir tiene que hay que hacerle las revisiones veterinarias que sean necesarias. Por norma general, con cada cambio estacional conviene llevarlo al veterinario, aunque este marcará las visitas en función de la salud y estado general de la mascota. Es importante detectar posibles enfermedades, infecciones respiratorias, quemaduras de almohadillas en los meses de verano, el estado de las pezuñas, y todos los signos que presente el perro fuera de lo común.

También hay que tener muy en cuenta que durante los meses más calurosos hay que prestar especial  atención a la hidratación. Adicionalmente se pueden adquirir artículos como una manta refrigerante para mejorar su calidad de vida si se vive en una vivienda sin aire acondicionado, o en un lugar donde haya mucho calor.

Por último, el ejercicio moderado y regular es algo que se debe cumplir a rajatabla si se pretende cuidar bien de la mascota. El ejercicio físico diario ha de incluir un mínimo de dos a tres paseos. Uno de ellos ha de ser más largo y si es posible, que permita al perro correr y ejercitar sus músculos. Cuanto más grande sea la raza más ejercicio va a necesitar, incluso puede que algunos perros requieran de deportes específicos para estar sanos.

Un buen consejo sería lanzarles un objeto para que vayan a por él y lo traigan de vuelta cuantas veces haga falta. De esta forma se lo está animando a moverse de manera divertida, y lo que para la mascota es un juego, se convierte en una verdadera clase de fitness canina.

Otro punto importante a tener en cuenta es dejar que tu perro olfatee mientras lo paseas. Los perros reconocen el mundo a través del olfato, por lo tanto, no dejarles olfatear es como si a los humanos nos vendaran los ojos para salir a pasear. También hay que animarlos a socializar y explorar el mundo que los rodea para que su mente permanezca activa y sana, al tiempo que se contribuye a su felicidad.