Récord de positividad desde febrero confirma la virulencia del despertar de la quinta ola

Los 157 nuevos positivos por PCR comunicados hoy confirman la aceleración de la quinta ola en Galicia. Es la peor cifra desde el 21 de mayo, hace cinco semanas.

Los casos activos continúan creciendo hoy por séptimo día consecutivo. De hecho, no crecían tanto en una sola jornada desde el 17 de abril.

Con todo, lo más alarmante es la evolución de la tasa de positividad. La media semanal supera hoy la barrera del 4% y Galicia pierde así el nivel de nueva normalidad que conquistó en febrero y que logró mantener incluso en los peores momentos de la cuarta ola.

La incidencia acumulada semanal crece hasta 34,7 positivos por 100.000 gallegos en siete días. No estaba tan alta desde el 25 de mayo. El problema no es tanto el nivel como la trayectoria. Son ya 11 días de ascenso seguido y además el salto de hoy es el más grande, el mayor en meses.

La incidencia acumulada a 14 días aumenta hasta 56,5 tras ocho jornadas seguidas de crecimiento. Sucede lo mismo que con su hermana pequeña. El problema no es tanto el nivel como la trayectoria. La velocidad de subida está siendo notablemente más rápida que en la cuarta ola.

El doble de la incidencia semanal ( 69,4  ) es mucho mayor que la incidencia bisemanal ( 56,6  ). Sabemos así que la última semana ha sido mucho peor que la penúltima. Como todos los días la diferencia entre las dos cifras aumenta, sabemos también que la pandemia no solo está creciendo desde un punto de vista semanal, su crecimiento cada vez es más veloz.

La tasa de positividad ayer fue del 6,4%. Es un porcentaje horrible para los estándares gallegos. Hay que remontarse a los peores momentos de la terrible tercera ola, a principios de febrero, para encontrar un número tan malo.

SITUACIÓN DE LOS INDICADORES EN EL SEMÁFORO DE ALERTAS

Según los criterios del semáforo de alertas oficial, la tasa de positividad de Galicia  llevaba desde mediados de febrero en nueva normalidad, pues le correspondía el mejor nivel posible a las autonomías con una media semanal inferior al 4%. 

Galicia pierde hoy ese nivel -como Galiciapress  advirtió ayer  que podía pasar- al ponerse la media en el 4,4%. De nuevo, el problema no es tanto el nivel, al fin y al cabo el indicador está en riesgo bajo, como la trayectoria.  Si alguien tiene alguna duda de que estamos ante una nueva ola que revise la curva de la media de la tasa de positividad:

La incidencia semanal se está disparando muchísimo más rápido que en la cuarta ola. Aún no ha llegado a los niveles soportados tras Semana Santa, pero a este ritmo es cuestión de días. De seguir esta trayectoria, nadie nos garantice que no volvamos a riesgo alto en julio.

La incidencia bisemanal perdió el nivel de riesgo bajo hace unos días y solo un milagro podría hacer que lo recuperásemos pronto. Su pendiente de ascenso es también más empinada que en la cuarta ola.

EVOLUCIÓN DE LOS CASOS ACTIVOS

La curva de la derivada de casos activos ha sido la mejor serie de la pandemia para estimar el rumbo que están tomando los contagios. Desgraciadamente, por ahora no hay ningún indicio de cambio de rumbo, sigue el ascenso y sigue acelerando.

El total de infectados sube  hoy un 6%.La media semanal, el indicador más relevante, completeotro paso alejándose de cero, crece del 3,1% al 4%. La curva que dibuja es escalofriante.

En términos absolutos, los porcentajes de hoy equivalen a un ascenso de +94, que deja el total en Galicia en  1.673 casos activos. Hay que remontarse a enero para encontrar un crecimiento de igual calibre.

CONCLUSIONES

Con todas estas estadísticas sobre la mesa, podemos inferir que:

• La pandemia en Galicia empieza a tomar un ritmo muy alarmante. No son los niveles de contagios o positividad los que nos deben preocupar ahora. Es la tendencia. No es que crezcan todos los indicadores, es que están creciendo a una velocidad rapidísima.
• ¿Se debe el alza solo a la llegada de estudiantes del macrobrote de Mallorca? No, diga lo que digan las autoridades el problema excede el foco estudiantil. Los indicadores llevaban ya semanas subiendo días antes de que explotara ese brote, incluso en zonas aún hoy no afectadas por él, por ejemplo Santiago. La variante delta y la relajación de restricciones y comportamientos influyen tanto más que lo de Mallorca.
• Menos mal que el 50% de la población gallega ya ha recibido al menos una vacuna. Esto está impidiendo una explosión de hospitalizaciones y decesos. Lo que no quita que aumenta la presión hospitalaria. Hace unos días estabamos en 33 hospitalizados en planta, son ya 44.

DATOS POR ÁREAS

A Coruña ( 34 ) y Vigo ( 33 ) son las áreas con más nuevos diagnósticos hoy. Hay que señalar que, en principio, A Coruña no está afectada por el macrobrote estudiantil y Vigo no es su epicentro en Galicia. Dudoso honor que corresponde a Pontevedra, que suma hoy 31 nuevos diagnósticos, casi lo mismos que A Coruña y Vigo pese a tener una población mucho menor.

Más datos a nivel municipal y de distrito del SERGAS en unos minutos en Galiciapress.