(VÍDEO) A Pobra sale a la calle contra el comité clínico, que justifica su cierre por la evolución de Ribeira y Boiro

Cientos de pobrenses cortaron hoy el tráfico de la AC-305, la principal arteria de la localidad, en protesta contra la prórroga de las restricciones impulsadas por el comité clínico y en apoyo a la tan castigada hostelería. 

La Xunta explicó en el último Diario Oficial de Galicia (DOG) que los motivos para mantener el cierre perimetral en A Pobra atienen a la "prevención" por la situación epidemiológica de los concellos vecinos y al peso de la industria pesquera en la localidad. 

Protesta de los vecinos de A Pobra | Foto: Bar Cova da Vella

Insumisión, rebelión, protesta... Muchas fueron las palabras que circularon estos días entre los pobrenses, si bien todas ellas fueron en los grupos de Whatsapp, ya que las reuniones de no convivientes están prohibidas desde el pasado sábado. Tampoco está permitido estar en la calle más allá de las 23 horas, ni salir del municipio sin causa justificada, ni la apertura de la hostelería. En este escenario, el Concello de A Pobra y el conjunto de la hostelería convocaron ayer a la ciudadanía a celebrar una protesta esta mañana en el municipio para protestar contra el dictamen del comité clínico, que el martes prorrogó las restricciones del municipio, al menos, una semana más, pese a los buenos datos de la localidad.

Los vecinos y la hostelería protagonizaron la marcha que bloqueó la AC-305 y, tomando cafés como símbolo de la protesta -cafés que muchos establecimientos repartieron gratuitamente a los manifestantes- marcharon por el centro del municipio desde la estación de autobuses hasta la Calle Venecia. 

Protesta de los vecinos de A Pobra | Foto: Bar Cova da Vella

Las mascarillas, la distancia de seguridad y la buena acogida de la manifestación protagonizaron una jornada de apoyo a la hostelería y al comercio pobrense, tan dependientes del turismo, especialmente en esta época del año en la que, habitualmente, comienzan a llegar los visitantes y aquellos que tienen en la localidad arousana su segunda residencia.

BUENOS NÚMEROS, PERO IGUAL DE CERRADOS

En el DOG publicado ayer el comité clínico razonó los motivos por el que A Pobra do Caramiñal permanecerá una semana más en el nivel máximo de restricciones. Según considera la Xunta, A Pobra “no lleva el tiempo suficiente en este nivel -riesgo alto- para asegurar que la evolución de su situación epidemiológica es la adecuada”, si bien en estos momentos, según el índice de positivos semanal apenas hay entre tres y seis positivos en la localidad y que la incidencia a siete días es de 107 casos por cada 100.000 habitantes; 418 casos por cada 100.000 habitantes en la incidencia a dos semanas.

Además de la marcha, esta mañana los establecimientos recogieron firmas para entregar al comité clínico “con un texto reivindicativo sobre la situación actual del sector de la hostelería y otros negocios afectados por el cierre obligatorio”.

PROTEGER A RIBEIRA Y BOIRO

Estos números, si bien son prometedores y alejan al municipio barbanzano del riesgo alto, no son suficientes para Sanidade, que sin embargo aventura que, con esta progresión, “en poco tiempo podría reducir el nivel de restricciones”. La justificación de más peso para el comité -y que más ha indignado a los pobrenses- es que A Pobra debe permanecer perimetrada por “precaución” con los concellos de Ribeira y Boiro, ya que la situación en ambas localidades “no es la óptima” y que siguen registrando “casos casi de continuo”.

Muchos cuestionan, según este criterio, que Ribeira no solo permanezca abierta, sino que nunca se llegase a plantear su cierre semanas antes, incluso cuando su situación epidemiológica era mucho peor que la de A Pobra. De hecho, el permanecer abierta Ribeira sin controlar brotes de dimensiones importantes como el registrado entre los trabajadores de la conservera Ignacio González Montes que avanzó Galiciapress, fue lo que provocó en gran medida el rebrote de la enfermedad en la comarca, con Lousame o A Pobra alcanzando el nivel de incidencia más alto en mayo.

Por otro lado, en el comité clínico debatieron la petición formulada por los cuatro grupos municipales en donde recalcaban la importancia que tiene el turismo en la economía del municipio y la necesidad de actualizar los criterios de las restricciones ahora que la presión hospitalaria en la comunidad ha descendido hasta niveles propios del verano de 2020.

En cambio, en lugar del peso de la hostelería para aliviar las restricciones, ha sido determinante el peso de la actividad pesquera para mantener el nivel más alto. Según refleja el DOG, la insdustria pesquera en A Pobra provoca “que la población tenga unas caracteristicas específicas con la alta mobilidad entre concellos limítrofes, parte de población de difícil acceso (embarcados, etc.); la peculiaridad del trabajo realizado en el mar y su industria derivada establecen múltiples interrelaciones tanto en el campo laboral como en el social, lo que complica la rastrebailidad de los casos”.

Del mismo modo, que la mayoría de los casos correspondan a la población menor de 45 años también ha sido determinante para los criterios de la Xunta. Por otro lado, la no muy alta participación en los cribados realizados y que A Pobra cuente de momento con un 21% de personas con la pauta completa de la vacunación son elementos que han jugado en contra del alivio de las restricciones.

¿REUNIÓN DE URGENCIA?

Un alivio que no llegará, casi con toda seguridad, hasta la semana que viene, cuando se vuelva a reunir el comité clínico, ya que desde el fin del estado de alarma, y al depender del visto bueno del TSXG, las reuniones han pasado de celebrarse dos veces por semana a ser únicamente los martes.

Sin embargo, cabe la posibilidad de que mañana se reúna el subcomité clínico, lo que podría adelantar el cambio del nivel de restricciones, si bien la propia Consellería de Sanidade mantiene que esta reunión no se producirá.