Asociación de pacientes alerta de riesgo de "contagio en cadena" en la UCI del CHUS y el SERGAS lo rebate

Mientras los contagios en Galicia y Santiago están disparados después de las Navidades, a la UCI del hospital de Santiago le faltan medios adecuados, según Asociación de Usuarios y Pacientes, carencias que el SERGAS niega.

Desde la Gerencia del Área Sanitaria, consultada por Galiciapress, señalan que las obras están programadas para este 2021, si bien la evolución de la pandemia influirá en su inicio. A su vez, recuerdan las inversiones que se vienen haciendo en material y medios para modernizar la unidad. 

Material del CHUS oxidado según una foto enviada por la Asociación de Pacientes

La Asociación de Usuarios y Pacientes del CHUS denuncia la “indignante situación” de la Unidad de Cuidados Intensivos del complejo hospitalario compostelano. Después de meses de movilizaciones por parte de los trabajadores del centro, en donde reivindican contar con “unos criterios mínimos de calidad y dignidad para la atención de los usuarios que presentan una gravedad extrema y que, en un contexto de pandemia, deberían ser mejoradas con urgencia”, la organización demanda una solución inmediata para la UCI.

Desde la plataforma critican con dureza a la gerencia del CHUS, encabezada por Eloína Núñez, a la que acusan de “no solo no actuar” sino de no sentirse “obligados a hacerlo”. “Banalizan la gravedad de la situación y miran para otro lado en un ejercicio intolerable de política de la avestruz y de desprecio de pacientes y profesionales”, reprochan, a la vez que ponen el foco en la alarmante falta de recursos en la unidad santiaguesa mientras la situación epidemiológica empeora en el área sanitaria capitalina.

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En este sentido, desde la plataforma detallan que en la actualidad, las camas en la UCI están “amontonadas y abiertas, separadas con cortinas de plástico, sin la mínima distancia de seguridad, lo que no solo constituyen un peligro constante para el personal del servicio, sino que además vulneran el derecho fundamental a la intimidad y a la dignidad de los pacientes”. A renglón seguido, advierten que esto podría motivar un “contagio en cadena”.

En esta misma línea, describen algunos de los elementos con los que cuentan los profesionales del área de cuidados intensivos: estantes oxidados, puertas desgastadas a las que tienen que tener atadas o con cuñas para mantenerlas abiertas, mesas de ordenador que se mantienen en uso empleando agujas  hipodérmicas de cargar para administrar medicamentos… Estas son solo algunas de las muchas deficiencias que presenta el espacio, que tampoco cuenta con “mantas o almohadas suficientes” para los ingresados en la unidad, por lo que los trabajadores se ven empujados a recurrir a “soluciones artesanales”.

En lo referido al material, desde la plataforma destacan que equipos como respiradores “, que debería ser suministrados por el SERGAS”, tienen placas que señalan que fueron donados por entidades financieras “que tienen la indecencia y baja  catadura moral, consentida por los responsables sanitarios, de hacer publicidad de su marca en un lugar y en una situación donde las personas están peleando entre la vida y la muerte”.

“Desde el mes de marzo del 2020, los responsables sanitarios sabían que las condiciones materiales de la UCI no respondían a las necesidades requeridas para hacer frente a una pandemia, y conocían que esas condiciones afectarían a los pacientes ingresados y al nivel de propagación del virus”, denuncian. Ahora, cuando faltan pocos meses para que se cumpla un año del confinamiento, el escenario ha empeorado sin que esto haya traído consigo un incremento en los recursos de la UCI.

“Los mismos responsables que están exigiendo conductas adecuadas a la población ante la crisis sanitaria, hacen dejación de sus deberes legales anteponiendo consideraciones presupuestarias u organizativas a la urgente atención hospitalaria y al deber de salvar vidas en condiciones de dignidad. Los ingresos hospitalarios y fallecimientos producidos son causa del virus pero también de las decisiones que se adoptan desde la administración para afrontar la pandemia”, esgrimen desde la asociación, que muestra públicamente su apoyo a los profesionales y sus reivindicaciones.

OBRAS EN 2021

Al hilo de esta denuncia, Galiciapress  pulsa la versión de la EOXI. Desde el SERGAS indican que la reforma integral de la UCI del CHUS tendría lugar este año “tal y como la gerencia se lo comunicó a los trabajadores en el 2020, lo anunció el conselleiro de Sanidad en el Parlamento y se incluyó en los presupuestos de la Xunta de Galicia para este 2021, con una cuantía de 1,5 millones de euros”.

Las obra  no pudieron acometerse el pasado año porque ninguna de las empresas consultadas daba un plazo inferior a cinco meses antes de su término, “por lo tanto se consideró arriesgado realizarlas en ese momento, decisión correcta a la vista de la situación epidemiológica producida tras el verano”, argumenta la gerencia, que también hace hincapié en la inversión de 800.000 euros para una “profunda renovación tecnológica en el servicio de cuidados intensivos”.

En ese mismo orden, subrayan la creación de una nueva “UCI específica para enfermos Covid” dotada de quince camas, además de la contratación de más de medio centenar de profesionales de enfermería, la implantación de un “nuevo sistema de monitorización en la vanguardia tecnológica que tuvo un coste de medio millón de euros”, la renovación del 80% de las camas para los pacientes críticos o la incorporación de cerca de una docena de respiradores “entre otra tecnología”.

“Además, en el mes de diciembre se llevaron a cabo obras de reforma y ampliación en la zona de vestuarios para poder adaptar el espacio a las necesidades de cambio de equipamiento de la  COVID”, señala la gerencia en su comunicado. Este apartado, el de los vestuarios, era una de las principales demandas de los trabajadores, que advertían en noviembre para este medio de las condiciones de estas duchas.

“Contamos con una ducha de 60x60 del siglo pasado para todo el personal. Eso significa que tienes que hacer cola para asearte y sales de trabajar sobre una hora y media más tarde. Es lamentable y tercermundista”

CONTACTOS CON LOS SINDICATOS

Desde la gerencia comentan que la dirección ya ha realizado “diversas propuestas al sindicato convocante de la huelga de la UCI” en donde se presentó, entre otras cosas, la reforma integral de la unidad programada para este 2021 e incluida en los presupuestos. Con todo, las obras carecen de fecha al depender de la situación epidemiológica, según argumentan desde la gerencia, que mantiene el plazo de ejecución en cinco meses.  

“Gracias a disponer de tres unidades de UCI además de la renovada Unidad de Cuidados Críticos, del servicio de Anestesiología y Reanimación, se pudo mantener en esta segunda onda a actividad quirúrgica del CHUS y no se vio comprometida su capacidad para atender a todos los enfermos críticos”, agregan, a la vez que recuerdan que más de un tercio de las camas UCI en España “son abiertas como las del Clínico”, por lo que esta situación no es exclusiva del hospital de la capital gallega.

MEJORAS LABORALES

Por otro lado, la dirección abordó también las denuncias referidas a las mejoras laborales y señala que han alcanzado acuerdos con el personal de enfermería, como “medidas de compensación del cómputo de la jornada laboral” además de asumir “solicitudes de restricción de la movilidad interna solicitadas por este colectivo”.

“Añadir en este sentido que es totalmente falsa la afirmación de la Asociación de pacientes y usuarios del CHUS de presiones laborales, ya que nadie fue obligado a reforzar otros servicios  tras su jornada laboral”, recalcan.  “Los trabajadores de la UCI del Clínico cuentan con jornadas de 7 horas (turno de mañana y tarde) y 10 horas (turno de noche), que son las habituales en el personal de enfermería que trabaja en todos los centros sanitarios nacionales”, concluye.