Huelga indefinida en las Urgencias del Clínico de Santiago

El paro tendrá lugar a partir del 12 de noviembre y los profesionales sanitarios piden cubrir todas las ausencias de trabajadores, agilizar la gestión y reemplazar material "obsoleto" o dañado, entre otras cuestiones.

Fachada del CHUS

El personal del Servicio de Urgencias del Hospital Clínico de Santiago (CHUS) ha convocado a partir del próximo 12 de noviembre una huelga indefinida para reclamar más personal y medios.

Los paros se llevarán a cabo todas las semanas, desde el lunes a las 8,00 horas hasta el jueves a la misma hora, una decisión que se toma tras "intentar un diálogo" con los responsables de la administración sanitaria que no ha llegado a ningún acuerdo concreto.

La Comisión de Centro del CHUS ha explicado este miércoles que "llevan tiempo reivindicando" una "serie de necesidades" imprescindibles para "ofertar a la ciudadanía una atención digna y de calidad, acorde con la ciudad" de Santiago, que "en estos momentos está muy lejos de conseguir esos parámetros de seguridad, tanto para los profesionales cómo para los usuarios".

Mirando a complejos hospitalarios "de volumen equitativo" al de esta área sanitaria, explica la Comisión de Centro, se observa una "infradotación" tanto de espacios, como de personal y medios, algo contra lo que reclaman que se intervenga.

RECLAMACIONES

Entre otras cuestiones, piden la elaboración de un plan funcional negociado con la Comisión de Centro y acordado con el equipo multidisciplinar, que esté "adaptado al a realidad asistencial" y contemple la utilización del 100% del espacio en el área de urgencias, con "dotación de personal de manera estable".

Del mismo modo, reclaman una "dotación suficiente de personal en todos los colectivos" que trabajan en Urgencias, que permita abarcar el volumen de pacientes, que, por ejemplo, el pasado lunes, día 29, fue de 448 personas.

A mayores, piden la reposición de material "deteriorado y obsoleto", la dotación del material necesario para cada puesto y la reparación de elementos dañados; la elaboración de protocolos para la asistencia de pacientes pendientes de ingreso mientras permanezcan en Urgencias y la priorización de las interconsultas que se generan en urgencias, con el objetivo de "evitar retrasos". Para concluir, inciden en la necesidad de cubrir el 100% de las ausencias de trabajadores.