La filial de Euskaltel lleva meses salpicada por la deslocalización de servicios que antes estaban en Galicia y por los planes de vender la fibra óptica instalada gracias a las subvenciones de la Xunta. La incidencia de hoy demuestra problemas en los servicios de atención al cliente.
A pesar del problema mecánico, el buque pudo entrar por sus propios medios en la dársena del puerto exterior de A Coruña.