Al borde de la huelga en los astilleros tras la muerte de un trabajador en Armón, Vigo
Urgen abordar cambios en el "modelo" productivo para acabar con la precariedad
La muerte de un trabajador de 41 años en el astillero vigués de Armón despertó la indignación de todo el sector, que marchó esta mañana por las calles de Vigo.
La manifestación tuvo una acogida multitudinaria y los sindicatos advierten a la Xunta que o toman medidas en el plazo de dos semanas o convocarán la huelga en todo el sector del naval.
Los trabajadores del naval de Vigo han vuelto a salir a la calle este jueves, horas después de que un operario de una subcontrata hubiera fallecido en un accidente laboral en un astillero de la ciudad, y han urgido a la Xunta la convocatoria de la mesa del sector en un plazo máximo de 15 días, para abordar la necesidad de cambios en las condiciones laborales. En caso de que la administración no acceda, han advertido, los tres sindicatos mayoritarios (CC.OO., UGT y CIG) llamarán a los trabajadores a la huelga.
Más de un millar de operarios se han concentrado en Beiramar a primera hora de la mañana de este jueves, jornada de paro en el sector debido al accidente mortal que costó la vida a un trabajador de una subcontrata que opera en Armón, y han recorrido las calles del centro de Vigo para finalizar ante la oficina de la Inspección de Trabajo en Cánovas del Castillo.
Allí, tras guardar un minuto de silencio, los sindicatos han leído un manifiesto en el que han recordado que "no hace ni un año" que se produjo otro fallecimiento en un siniestro, en aquella ocasión en Cardama, y han subrayado que esos resultados fatales son "producto de las condiciones laborales y la falta de compromiso de la Xunta de Galicia y la Inspección de Trabajo que, desoyendo las distintas denuncias, siguen haciendo caso omiso de las mismas".
Las centrales han denunciado que el sector naval sigue padeciendo "precarización, subcontratación, ritmos de trabajo elevados, falta de políticas e inversión en materia de prevención laboral y jornadas abusivas". Se trata, han incidido, de un "modelo subvencionado" por las administraciones y que es el que se aplica, entre otros, en Armón, donde se ha producido ése último accidente mortal.
"El naval, como sector de alto riesgo, tiene que apostar por una industria auxiliar fuerte y con estructura, con capacidad de aportar en la prevención y seguridad de los trabajadores", han advertido, y han denunciado que, entre otros factores, tras los accidentes se esconden los problemas de coordinación en los centros de trabajo donde, además de las plantillas propias, se juntan trabajadores de decenas de contratas y subcontratas.
En este escenario, los sindicatos han advertido de que "se acabaron las esperas y las buenas palabras", y han lanzado un ultimátum a la Xunta: o convoca la mesa del naval en los próximos 15 días, o las centrales convocarán huelga en el sector.
Entre los aspectos que se deben abordar en ese foro, han señalado, está el análisis del modelo de producción del sector, la "necesaria jubilación anticipada", o los coeficientes reductores que sirvan para rejuvenecer las plantillas.
El manifiesto ha concluido con la exigencia a las administraciones de que "dejen de huir de sus responsabilidades" y con la advertencia de que los trabajadores no esperarán "a que muera otro compañero más".
PORTAVOCES SINDICALES
El responsable de CC.OO. Industria en Vigo, Celso Carnero, ha insistido en que es en la mesa del naval "donde se tiene que hablar del modelo del sector, del futuro y las medidas de seguridad", y que es el momento de abordar estas cuestiones sin dilación.
Según ha señalado, "todos los accidente son evitables" y cuando se produce un siniestro mortal, "lo normal es que antes hubiera muchos en los que hubo suerte". "Y no podemos vivir de la suerte, ni dejar a su suerte a los trabajadores", ha proclamado.
El portavoz de CIG Industria, Xulio Rodríguez, ha denunciado que, desde que se produjo la muerte de un operario en Cardama (aplastado por un gran bloque de acero, en noviembre de 2022), "no se hizo nada" ni se avanzó en medidas, ni se convocó la mesa del naval.
"Si el sector naval es precarización, empresas de síntesis, donde se trabaja sobre subcontratación y subcontratación continua, obviamente eso es imposible de coordinar", ha afirmado, y ha recordado que la última víctima mortal, trabajador de una de esas contratas, llevaba apenas unos días en el astillero y probablemente "tampoco debía tener la formación adecuada".
Rubén Pérez, de UGT ha criticado que las administraciones y las empresas "no se quieren implicar en la mejora de las condiciones" del sector, y que "solo se acuerdan" de la mesa del naval cuando hay un fallecido. Al respecto, ha subrayado que ese órgano debe servir precisamente para "anticiparse" y evitar los accidentes, y ha expresado su deseo de que la tragedia de Armón sirva, esta vez sí, "para que todos cojan conciencia" y actúen.
Escribe tu comentario